La familia de uno de los abogados baleados en su despacho en Xicotepec el pasado 14 de noviembre, aclaró que su hijo está con vida, aunque en un crítico estado de salud y rechazó que haya cometido algún fraude, al contrario, señaló que el ataque contra los abogados es producto de la inseguridad que se vive en el municipio.

El 16 de noviembre www.municipiospuebla.com.mx dio a conocer que una de las líneas de investigación sobre los homicidios tenía que ver con una posible traición a alguno de sus clientes. 

A través de una llamada telefónica y un documento, su familia relató que desde el día en que su hijo y Jorge Mejía Pérez fueron agredidos, vive con temor pues se ha tendido una cortina de humo sobre este ilícito, incluso difundiendo a través de algunos medios de comunicación “noticias antiéticas y con dolo” para afectar a personas de trabajo y justificar que los culpables somos nosotros como ciudadanos y no las autoridades”, en las que lo acusan de haber “robado” a algunas personas.

También se denunció que los responsables de la muerte de Jorge Mejía Pérez, “estacionaron su vehículo afuera del despacho –ubicado en el número 7 de la calle Encino- bajando dos asaltantes y homicidas mientras que uno se quedó en el vehículo esperando”.

Mientras Wenceslao M. -cuya esposa e hijo vivían en este mismo lugar en la planta alta- se encontraba trabajando, los presuntos delincuentes se registraron en el libro de visitas, se sentaron a esperar su turno y cuando les indicaron que podían pasar a la oficina se encontraron con Jorge Mejía, al que le dispararon un único balazo y murió inmediatamente en un pasillo.

Cuando la esposa escuchó el disparo, se asomó por la escalera y uno de los maleantes le ordenó que abriera la puerta y que le entregara sus pertenencias. La mujer les dio tres mil pesos, luego de lo cual dispararon contra Wenceslao M. un solo tiro en la cabeza, provocándole traumatismo craneoencefálico severo de tercer grado.

Los atacantes emprendieron la huida, pero antes se llevaron el DVR con el registro de las cámaras de vigilancia, el libro de registros, algunos teléfonos celulares y computadoras.

En tanto la esposa empezó a pedir ayuda a gritos, pero ningún vecino la auxilió. Ella misma reportó los hechos a la policía y pidió auxilio a la Cruz Roja que llegaron 15 y 20 minutos después, respectivamente.

Gravemente lesionado Wenceslao M. fue conducido al Hospital Integral de Xicotepec, donde únicamente lo sedaron e intentaron parar el sangrado, pero dijeron que no había ni aparatos ni medicamentos para responder a esta situación. “En el hospital nos dijeron que no era su culpa ya que no cuentan con el equipo necesario, que ellos estaban allí trabajando, pero que sin equipo y material” por eso fue necesario trasladarlo a un nosocomio en otra ciudad. 

Conseguir la ambulancia se complicó. En el Hospital Integral de Xicotepec dijeron que no contaban con un vehículo que pudiera garantizar el traslado sin contratiempos”, que era muy básica y estaba descompuesta. En la Cruz Roja de Xicotepec al principio se negaron a trasladarlo diciendo que debía estar estable para poder darles el servicio, pero luego de diversos trámites accedieron a hacerlo.

La familia afirmó que Wenceslao M. era un abogado sin problemas, ni antecedentes penales. Se dedicaba a ejercer su profesión en materia civil. Vivía con su familia. “Tiene muchos amigos xicotepenses y de la región que lo conocen y respetan, además se sabe que es una persona íntegra y sus actividades las ha realizado con transparencia y apegadas a las leyes”.

“No le ha robado a ninguna persona abusando de su profesión, con todos ha quedado bien y vivía tranquilo. Esto lo saben todos los profesionistas y amigos que lo conocen y respetan”.

“Tenemos mucho temor como familia, pues he sabido que en algún medio de comunicación se dijo que robó a algunas familias dinero. Que cobró mucho dinero de una empresa de gas, cosa que no es verdad, pues como ya lo expliqué nunca tuvo nexos con nadie ni se asoció ni cobró dinero alguno y tengo pruebas claras”.

“Queda muy oscuro este suceso, ya que repentinamente asesinan a su compañero y a él lo dejan gravemente herido y repentinamente también sale un nota extensa en un medio de comunicación como si se hubiera planeado. Mi pregunta es: ¿por qué o quién fue? y yo confío en que la justicia hará su trabajo”, concluyó la familia.