Se trata de un grupo de personas que se manifestaron el pasado 2 de junio, tomando la carretera Interserrana a la altura de la junta auxiliar perteneciente a Tlaola.
Durante una mesa de trabajo estuvieron presentes los habitantes, personal de la Secretaría General de Gobierno y el edil de Tlaola, Abdías Castillo Castillo.
Los propietarios calculan los daños en poco más de medio millón de pesos, pues las albercas, toboganes, áreas de comida y jardines fueron sepultados por los deslaves.