Los restauranteros de San Martín ya pagan la factura que la delincuencia les dejó desde inicios de 2018, mientras que en Tlacotepec la gente vive con temor.
Los equipos de Dalila Tienda Gallegos y Porfirio Castro Mateos, quienes están divorciados, han estado involucrados en actos de violencia en lo que va de la campaña.
A las balaceras en plena vía pública siguió un ataque con arma de fuego contra la casa del edil Rafael Núñez y finalmente la aparición de cuerpos desmembrados.