En 2019, la jueza Carol Bagley, le dio una sentencia de 20 años de prisión, 5 años de libertad supervisada y la devolución de más de 1 millón de dólares
Por falta de organización entre el Centro de Detención Metropolitana en el que se encuentra y la corte federal de Brooklyn, Nueva York, ante la cual tenía que presentarse vía remota.
Utilizaron esas entidades y los fondos robados, ilegalmente convertidos o tomados ilegalmente del gobierno de México que habían sido transferidos y recibidos en los Estados Unidos