Miguel Ángel Romero Calderón aseguró que el amparo que presentó Ernestina Fernández Méndez no pretendía salvarla de responsabilidades, sólo buscaba que se notificara adecuadamente del proceso en su contra.
Refirió que toda autoridad, política o religiosa, puede ser removida en caso de comprobarse situaciones que afecten a las personas bajo su responsabilidad.