Invitaron al flautista para que los guíe a su paraíso sin democracia ni libertades, y le exigen dinero al presidente del país que quisieron sacar de la OEA.
La invitación a Xi Jinping a que fuera el único presidente ajeno a la región de América Latina y el Caribe para dar un discurso en la Celac es una toma de posición.