Lideró Eduardo Rivera cofradía de violentadores: Elia Rojas

Es empresaria, es joven y viene de una familia de clase media, el fenotipo de una mujer espigada y finas formas que lee y viaja; se asumió machista hasta que conoció el feminismo “a mi me abrieron los ojos a putazos, es una realidad muy cruda, pero es la realidad que viví”, dice Elia Rojas Villalpando.

En entrevista con Parabolica.mx, desde la comodidad de unos pantalones de mezclilla, sandalias y una holgada camisa blanca de algodón en un día con un promedio de temperatura que ronda los 30 grados, vuelve a la narrativa de miedo por haber padecidouna relación asimétrica, vulnerable frente a un hombre de poder, su pareja. 

Fue Michael Chaín Carrillo, excandidato a gobernador por el Partido Verde en 2018 y secretario en el gabinete entrante del panista Eduardo Rivera Pérez en 2021, ahora convertido en candidato a gobernador por una alianza de su partido, el PRI, PRD y Pacto Social de Integración.

“Yo no sabía lo que era la violencia, no sabía lo que eran los golpes; mi mamá y mi familia me dieron una vida de Disneyland; o sea yo vivía en una burbuja en donde no había visto ni tratado con una persona violenta. A mí me costó mucho trabajo, normalizamos los episodios de violencia”.

Era 2017 cuando ocurre la primera agresión física. Fue cuando se encontró con el político que había sido funcionario de primer nivel en el gobierno de Antonio Gali Fayad, el gobernador aliado del fallecido Rafael Moreno Valle en 2017, en un restaurante.

“En mi caso yo pensé que había sido porque estaba con copas, le dio un ataque de celos, fue mi mala elección, no debí ponerme ese vestido, no tuve que haber llegado tarde. Desgraciadamente vivo el primer episodio de violencia y quedo en shock, pero no entendía qué había sucedido. Lo tengo en mi mente muy fresco”.

El patrón de conducta del exfuncionario panista no era desconocido para nadie, ya se conocía la fama de maltrato para colaboradores y subalternos. Es un personaje de carácter irascible y explosivo “pero una lo minimiza, una piensa conmigo va a cambiar, no va a ser así”, tras una relación que había durado dos años y medio, recuerda Rojas Villalpando.

Se mantuvo en silencio y bajo perfil hasta que el terror la invadió. “Te lo digo viéndote a lo ojos, en un ataque de pánico, estoy en Twitter viendo noticias cuando veo su nombre como posible integrante del gabinete entrante del presidente municipal Eduardo Rivera y a mi se me va el aire. Aviento el celular a la cama en un ataque porque estoy convencida de que el señor fue violento conmigo porque se sentía intocable”.

La Fiscalía Especializada en Violencia de Género acompañó el largo proceso hasta que a principios de abril de 2024, el Tribunal Superior de Justicia lo encontró responsable y se llegó al principio de justicia restaurativa, no obstante el intento desaforado del violentador por imponer una mordaza a su víctima para evitar siguiera exponiendo en medios y foros el caso de abuso en una relación asimétrica por el poder que alcanzó el victimario.  

Elia Rojas Villalpando, recuerda, tocó las puertas del palacio municipal para exponer su caso ante el edil de la capital, Eduardo Rivera. Las encontró cerradas y nunca se abrieron para ella.

“De hecho públicamente le pedí al presidente que estaba ya tomando protesta, Eduardo Rivera que me recibiera, le dije deme la oportunidad de que usted me vea a los ojos y me permita platicarle uno a uno los golpes que me dio su secretario”.

¿Y te abrió la puerta? - No, por supuesto que no, nunca me abrió la puerta.

Tres años después de haber mantenido las puertas cerradas a la petición de esta poblana que había sido violentada por quien fue su secretario de Gestión y Desarrollo Urbano, Michel Chaín Carrillo, Eduardo Rivera ofreció cuidar a las mujeres “como nunca”, dice en un material promocional de campaña colocado en sus redes sociales.

“Quienes sean agredidas contarán con refugios, viviendas y empleo temporal; regresar a vivir con el agresor no será más una condena (…) y nunca más nadie las violente, quien se meta con ellas, se meterá con el gobernador”, dice un Rivera Pérez con voz firme que contradice su actuación exhibida como edil de la capital.

“Fue soberbio, insensible a lo que yo estaba viviendo porque yo me imaginaba en mi cabeza, ilusa, ingenua que el señor (Rivera Pérez) me mandaría al particular, del particular del particular para decirle atiéndanla. Pero nada, viví nueve meses de zozobra porque él (Chain Carrillo) era protegido por una cofradía, una hermandad de poder ”.

-Elia qué piensas cuando vez a Eduardo Rivera decir que quien violente a una mujer se mete con Eduardo Rivera?

Pienso que es un mentiroso, sin vergüenza, me enoja mucho escuchar decir eso como slogan de campaña cuando a mí me consta en carne propia que siendo yo una víctima de uno de sus funcionarios del primer círculo me invisibilizó, revictimizó. Me hizo pasar los peores nueve meses de mi vida, responde.

-Si tuvieras la oportunidad de tener enfrente a Eduardo Rivera, ¿qué le dirías?

Que ya no se atreva a mentir con el tema de las mujeres. No soy la única, son ya 27 víctimas de funcionarios cercanos a él que están padeciendo lo mismo que yo en 2021. Puede hablar de lo que él quiera, pero yo estoy aquí para recordarle que a él no le importamos las mujeres, él tuvo la oportunidad de al menos haberme recibido. Que me viera a los ojos. 

“Ningún agresor en el poder”, es mi lema.