VW, factor de gobernabilidad

La industria automotriz poblana, desde la llegada de Volkswagen en 1967, se ha convertido en factor de gobernabilidad.

Ningún gobernador en funciones se ha divorciado de los intereses de la armadora alemana. Por el contrario, los ha hecho suyos.

La razón es simple:

VW, cito a la revista Expansión:

“No solo trajo consigo empleos directos, sino que detonó la instalación de una red de proveedores que en conjunto con la armadora representa el 43.4% del Producto Interno Bruto (PIB) de la entidad, según datos de la Secretaría de Economía.

“Actualmente, la planta de Volkswagen en Puebla es la más grande de la firma en América y la segunda más grande fuera de Alemania, solo detrás de la de China.

“Su impacto es tal que el ecosistema de proveeduría, infraestructura y servicios creados a su alrededor ha justificado inversiones adicionales, como la llegada de Audi en 2012.

“Ambas plantas generan en conjunto 20,000 empleos directos, además de decenas de miles de puestos indirectos en la cadena de suministro y servicios asociados”, hasta aquí la cita.

Que una empresa genere la mitad del PIB en Puebla no sólo es motivo de interés, sino de urgente atención.

Mariano Piña Olaya lo entendió cuando en misión comercial con su secretario de Economía, Salvador Cué Silva, logró convencer a los alemanes de constituir una red de autopartes para crear el sistema Just on time.

Manuel Bartlett concretó y trajo a la primera veintena, mediante una gestión directa de su secretario del ramo, Mario Riestra Venegas para construir el mayor clúster de autopartes, alrededor de VW.

Melquiades Morales donó terrenos en la zona de Huejotzingo para crear la llamada Ciudad Textil que sirvió de soporte a la industria automotriz en la vestimenta de interiores.

Incluso, Rafael Moreno Valle no sólo subsidió programas de capacitación y mano de obra de VW y aliados, sino que se trajo a AUDI para San José Chiapa.

Sergio Salomón y Alejandro Armenta fueron a Alemania a gestionar nuevos proyectos e inversiones para la nueva VW eléctrica.

Se sabe pues del valor que tiene la Volkswagen en la estabilidad política de Puebla.

Falta dar el paso para capitalizar un frente común de empresarios y autoridades.

Un estado en crisis de empleo y cierre de negocios beneficiados directa e indirectamente por VW a nadie conviene.

 

clh