• Puebla

Sin pena ni gloria, la campaña publicitaria de los hermanos Luna Porquillo

  • Fermín Alejandro García
lOS anuncios no tienen el propósito de posicionar a Roxana Luna como una youtuber, sino es el intento de los hermanos Luna Porquillo de poder “sobrevivir” en el ambiente político del estado

Uno de los corredores urbanos que se ha convertido en el principal escaparate de la propaganda política es la Recta a Cholula, por donde circulan diariamente un promedio de 40 mil vehículos. Ahí han colocado anuncios los principales actores que buscan brillar en el proceso electoral de 2024. Y también lo que intentan “sobrevivir”, como es el caso de los hermanos Roxana y Vladimir Luna Porquillo, que con dos espectaculares en esa zona intentan reposicionarse como figuras del PRD, aunque sin mucho futuro.

Esa vialidad une a la capital con los municipios de San Pedro y San Andrés Cholula, así como Cuautlancingo, que son las áreas más pobladas de la zona metropolitana de Puebla, siendo esa la explicación de porque se ha transformado en el corredor urbano más reñido para conseguir un espacio en la publicidad de gran formato.

Quienes acapararon los grandes cárteles en esa vía, de apenas 6 kilómetros de largo, son el empresario textil José Chedraui Budib, quien busca que le abran las puertas de Morena para ser candidato a edil de la ciudad de Puebla; el diputado federal Ignacio Mier, el senador Alejandro Armenta y Julio Huerta, quienes luchan por la nominación de la 4T al gobierno del estado; así como el excanciller Marcelo Ebrard Casaubón, una de las llamadas “corcholatas” que intenta ser el abanderado presidencial del movimiento obradorista.

Todos los anteriores personajes gravitan en torno al proyecto electoral de la 4T, la fuerza política dominante en el país, por la enorme popularidad del presidente Andrés Manuel López Obrador.

Los únicos anuncios que se salieron de la dinámica de Morena, en la lucha por los espacios político que están en juego, son dos espectaculares que promocionan un programa en redes sociales de la exdiputada federal Roxana Luna Porquillo, quien además es dirigente del PRD, junto con su hermano Vladimir, quien es el secretario general del partido del sol azteca a nivel estatal.

Dichos anuncios no tienen el propósito de posicionar a Roxana Luna como una youtuber, sino es el intento de los hermanos Luna Porquillo de poder “sobrevivir” en el ambiente político del estado, luego de que han entrado en una severa crisis de prestigio, en la que perdieron todo el liderazgo que habían alcanzado dentro de la izquierda poblana.

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La situación es complicada para el PRD en el escenario de la contienda de 2024, ya que al partido únicamente le tocarán reducidos espacios que le cederá el Frente Amplio por México, en donde las principales candidaturas a cargos de elección popular serán para miembros de la derecha, es decir el PAN y los grupos empresariales controlados por Claudio X. González.

En Puebla la única figura que perece tener un buen futuro político es Carlos Martínez Amador, el presidente estatal del PRD en la entidad. No solamente ha logrado desplegar un trabajo de promoción de su persona en todo el estado, sino le regresó presencia al partido al emprender una consulta sobre la problemática del agua en los principales municipios de la entidad.

Carlos Martínez Amador es un firme aspirante a ser candidato a senador o diputado federal, además de ser quien participa directamente en la construcción del proyecto electoral de la coalición del PAN, el PRI y el PRD en Puebla.

A diferencia de los hermanos Luna Porquillo que no encuentran el camino para recuperar el capital político que perdieron en los últimos 5 años, luego de que habían sido las figuras más importantes de la oposición en Puebla.

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Entre 2011 y 2017, los Luna Porquillo habían representado la renovación de los liderazgos de la izquierda en Puebla. En ese periodo encabezaron un importante movimiento social en la región de las comunidades del volcán Popocatépetl. También fueron la única oposición real y organizada al gobierno de Rafael Moreno Valle Rosas, uno de los mandatarios más autoritarios de las últimas décadas.

Su punto de quiebre fue en 2018, cuando Roxana Luna pactó con el morenovallismo y se volvió una aliada de la corriente política que tanto había combatido.

En los últimos años Roxana Luna intentó conservar su acercamiento con la derecha, razón por la cual hizo una alianza con Paola Angon Silva, la alcaldesa panista de San Pedro Cholula, pero ese acuerdo ya se rompió y ahora hay un distanciamiento entre ambas mujeres.

A lo largo de 2022, los hermanos Luna Porquillo buscaron entrar a Morena, por la vía de los equipos locales de apoyo de los aspirantes presidenciales de la 4T. Ninguna expresión les quiso abrir las puertas.

En febrero de este año, crearon una organización llamada Frente de Pueblos Productores de Hortalizas e intentaron frenar el programa de verificación vehicular. Ese esfuerzo fracasó por la incursión violenta de los miembros de esa agrupación en una movilización que terminó frente a Casa Aguayo, que únicamente les dejó fuertes críticas por su actitud pendenciera.

Y ahora enfrentan el problema de que han perdido su base social, el liderazgo en el PRD y la posibilidad de obtener candidaturas en el Frente Amplio por México.

Su lucha, como la de muchos actores políticos, es no desaparecer de mapa electoral en 2024.

Columna Cuitlatlán de Fermín Alejandro García

La Jornada de Oriente

Foto: Especial

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