“Si las personas contagiadas de COVID-19 no respetan su aislamiento hasta dar negativo a una nueva prueba, deberán ser enviadas a prisión”, esta es la propuesta del diputado independiente, Edgar Sánchez Garza, de Coahuila.

Esto sería una modificación en el artículo 216 del Código Penal de la entidad y en este se pretende imponer de tres meses a tres años de cárcel además de una multa económica que podría ir de los 8,688 pesos a los 34,752 pesos.

“Si las personas contagiadas de COVID-19 no se aíslan como lo estipula las autoridades de salud de los tres niveles de gobierno; por el contrario, salen a las calles a realizar compras o para hacer actividades recreativas, poniendo en riesgo la salud de las demás personas”, dijo el diputado.

Agregó que, si las personas que no cumplen con los cuidados necesarios tienen menos de 18 años o más de 60, el castigo podría ser de cinco años de prisión.

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