Las últimas dos denuncias contra uniformados fueron presentadas ante autoridades federales, una vez que se confirmó su colaboración con los ladrones de combustible.
Es el segundo robo contra una institución educativa en lo que va del ciclo escolar en esa demarcación, por lo que padres de familia exigieron reforzar la vigilancia.
En diversos operativos las autoridades les decomisaron camionetas, camiones, pipas y hasta un autobús del transporte público que eran usados para llevar el hidrocarburo robado.