El caso más reciente se registró el 13 de mayo, cuando una familia se encontraba desesperada al encontrar a su perrita Canelita con su cuerpo lleno de sangre
Pobladores colocan veneno en alimento que dejan en la vía pública, parques y jardines, el cual es ingerido por los canes, los cuales mueren por la ingesta de las sustancias
Dicho caso se suma al que ocurrió a inicios de 2016, con la muerte de 33 perros en el fraccionamiento El Riego, situación en la que no fue posible encontrar al responsable.