La propietaria dijo que el inmueble habría sido dañado por el sismo del 7 de septiembre y que Protección de Atlixco y el INAH no le autorizaron las reparaciones
Dijeron que las aulas presentaron fisuras tras el sismo de 7 de septiembre y que se hicieron más grandes con el último movimiento telúrico, además de que se fracturaron el techo y las columnas.