¿Será Tlatlehui el fiel de la balanza en la elección del PAN?
El sorpresivo respaldo de Edmundo Tlatehui Persino a la candidatura de Mario Riestra Piña en la búsqueda de la presidencia estatal del PAN, ha resultado ser “un gancho al hígado” en contra del líder del panismo tradicional, Eduardo Rivera Pérez, cuya corriente cada vez se observa más vulnerable, más debilitada, sin capacidad de sumar nuevos apoyos en la disputa por el control del Partido Acción Nacional.
Todavía es prematuro saber si Edmundo Tlatehui, el exalcalde de San Andrés Cholula, acabará siendo “el fiel de la balanza” para determinar al ganador de la contienda interna del PAN, luego de que los últimos conteos apuntan a que está muy cerrada la disputa de los votos de los 114 integrantes del Consejo Estatal del albiazul, entre los aspirantes Mario Riestra Piña y Felipe Velázquez Gutiérrez, siendo este último el candidato del grupo de Rivera Pérez.
Tlatehui hoy en día es el líder panista con mayor capital político y con el mejor prestigio, luego de que fue el único, en todo el estado, que logró derrotar a la 4T en los comicios del pasado 4 de junio. Además, ha encabezado una creciente corriente de militantes albiazules que demandan la democratización interna del partido de la derecha.
Según las estimaciones que ayer –los seguidores de Riestra– empezaron a difundir es que la suma del exalcade cholulteca le significaría a esta corriente rebasar la línea de 58 consejeros, que es la cifra mínima para ganar la presidencia del partido en la asamblea del próximo 15 de diciembre.
Incluso se asegura que la fórmula de Riestra y de Genoveva Huerta Villegas, quien va por el cargo de secretaria general, ya estaría rozando los 70 votos en el Consejo Estatal del PAN.
Fuentes confiables del partido creen que todavía no hay una definición del ganador de la elección, pues se cree que hay “un voto flotante” de aproximadamente entre el 15 y 20 por ciento de los consejeros estatales, que lo mismo le prometen su respaldo a Riestra y a Velázquez. Le están apostando a ver con quien se entienden mejor hasta los días previos de los comicios.
Lo cierto es que la definición de Tlatehui ha venido a robustecer la candidatura de la dupla de Mario Riestra y Genoveva Huerta, y le ha inyectado una alta dosis de debilidad al grupo de Eduardo Rivera, que se empieza a ver con un alto grado de desesperación por no poder tomar ventaja en la pelea por el Comité Directivo Estatal del instituto blanquiazul.
Esa desesperación se ha reflejado en el intento del grupo de Rivera de que se posponga la elección hasta principios de 2025, de acusar a Riestra de “comprar” consejeros y con el intento que hubo de “rasurar” a 11 integrantes del Consejo Estatal del partido.
El efecto Tlatehui
Cuando el Comité Ejecutivo Nacional del PAN decidió que el próximo dirigente de Puebla se elegirá en el Consejo Estatal y no por el voto de la militancia, Tlatehui decidió que no participaría en la contienda interna, junto con el panismo de San Andrés Cholula, como muestra de desencanto de que no se permitió a la militancia –tal como él lo venía reclamando— decidir quienes deben ser su nuevo líder.
La posición del exedil sanandreseño era que no iba a legitimar un proceso electoral antidemocrático.
El hecho de que Tlatehui apareciera este jueves al lado de Riestra y Huerta, significó darle a esta formula el signo de la inclusión, que ha sido la bandera de ambos aspirantes.
Mario Riestra y Genoveva Huerta son dos políticos que nacieron, crecieron, se desarrollaron y tuvieron sus mejores cargos a la sombra del extinto exgobernador Rafael Moreno Valle Rosas.
El tener la marca de “morenovallistas” los alejaba de muchos panistas que sufrieron exclusión y persecución por parte de Moreno Valle.
Riestra tuvo el tino, primero de reponerse de la reciente derrota electoral que sufrió en los comicios de la capital, y después sorprendió a propios y extraños cuando pactó una fórmula con Genoveva Huerta, de quien se había alejado los últimos seis años.
Eso le permitió incorporar el concepto de “inclusión”, que le ha llevado a conseguir apoyos plurales a su candidatura, como es el caso de Mónica Rodríguez, quien representa a un sector importante del panismo tradicional. Así como a los yunquistas Roberto Grajales, Ángel Alonso Díaz Caneja y Humberto Aguilar Coronado.
Ahora, esa visión de inclusión se ha potencializado con la llegada de Edmundo Tlatehui, que en el pasado reciente había tenido discrepancias con Riestra y sobre todo con Genoveva Huerta, pues esta mujer cuando fue presidenta estatal del PAN, en el año 2021, intentó dejar fuera a Tlatehui Persino de la candidatura a la alcaldía de San Andrés Cholula.
La inclusión que ha logrado la dupla de Riestra y Huerta contrasta con el comportamiento cerrado, ortodoxo, de Eduardo Rivera que ha perdido la capacidad de hacer alianzas. En su facción únicamente él toma las decisiones y solo participan los que han sido parte de su grupo, como es el caso de Felipe Velázquez.
clh