Censuran al grupo que les dio pluris en el PAN local

Muy fácil ahora es subirse al tren de los madrazos contra la dirigencia del PAN y candidatos/as derrotados en las urnas, el 2 de junio.

Las voces panistas más críticas tendrían que guardar silencio.

Aceptaron las reglas, y gracias a la madriza electoral que le propinaron al PAN, quedaron con hueso.

Genoveva Huerta, exdirigente estatal y diputada federal negoció con ese grupo que taaaanto censura que fuera ella en la lista plurinominal a la Cámara Baja.

¿No sería congruente dejar la pluri y venir a Puebla a denunciar lo que ella misma convalidó y resultó premiada?

El mismo caso ocurre con Rafael Micalco, alejado de la campaña, también aceptó que el grupo interno en el PAN que ahora combate le diera su pluri local.

¿Entonces?

¿Dónde anduvo Micalco en la contienda estatal?

Otro caso lamentable es el de Mónica Rodríguez, la diputada local, quien renunció a la candidatura federal por el distrito 9 “por razones personales”.

No quiso enfrentar al hijo del exgobernador Antonio Gali, y huyó de la contienda. Nunca se le vio enfrentar a los malandros de Morena.

Y quién se llevaría el Óscar al cinismo azul es Eduardo Alcántara Montiel, quien jugó en la contienda interna con Morena, partido que postuló a su esposa como candidata a diputada local por la capital. No hay más traidor que él.

Mario Riestra, quien ahora pretende la dirigencia estatal del PAN sólo por ser el mejor amigo de Marko Cortés, ooootro impresentable.

Es válido exigir por parte de excluidos y marginados, pero que no recibieron premio alguno, como es el caso de Guadalupe Leal o Edmundo Tlatehui.

Los demás que sabían las reglas, callaron por recibieron pluris del grupo que perdió y ahora exigen cuentas, es la peor estulticia en la historia panista.

 

clh