Los que se fueron; las que quedan

Van 21 titulares de secretarías del gobierno de Puebla que han sido separados/as de sus cargos por diversas razones.

El gobernador Luis Miguel Barbosa ha dejado en claro que los cambios en su administración seguirán. Nadie debe sorprenderse.

Según el ángulo en que se analicen las remociones en el gabinete, lo que más predomina es la salida por señalamientos de irregularidades, más allá de asuntos ligados a la lealtad política.

Guillermo Aréchiga, de Movilidad, se encuentra en prisión por corrupción; Salomón Kuri Contreras y María Concepción Lugo, dejaron Administración por no poder con las tareas encomendadas hasta que llegó Rosa de la Paz Artuzuástegui, quien pasó como magistrada del Tribunal de Justicia Administrativa.

Julio Glockner renunció a Cultura ante su oposición a proyectos de gobierno, como el traslado de la rueda de la fortuna y el manejo del acervo.

Fernando Manzanilla se fue de Gobernación, en medio de señalamientos de operar al margen de las indicaciones de la 4T. En medios se documentaron actos de deslealtad.

David Méndez llegó a sucederlo en Gobernación, pero además de tibieza ante los problemas coyunturales se alió al grupo político de Claudia Rivera en momentos que estaba en confrontación con el barbosismo.

En Seguridad Pública van cuatro secretarios cesados: Heliodoro Luna, Miguel Idelfonso Amezaga, Racial López Salazar y Rogelio López Maya. El tema del manejo de privilegios en el penal de San Miguel que siguieron, aunque el gobernador había pedido expresamente acabarlos. Sobre algunos hay procesos legales en marcha.

Juan Daniel Gámez terminó su paso por Infraestructura, ante la parálisis de las obras y acusaciones de favoritismo a constructoras.

Mónica Díaz de Rivera se fue de Igualdad Sustantiva. Se sabe que a pesar del apoyo que siempre recibió acabó por criticar severamente al gobierno en privado.

En la Función Pública tres secretarias dejaron la posición: Karen Berlanga, Laura Olivia López Villaseñor y Amanda Gómez, quien pasó a la Auditoría Superior del Estado.

Jorge Humberto Uribe no pudo en Salud.

Fabiana Briseño y Vanessa Barahona fueron despedidas de Turismo. Hoy se sabe que existen expedientes por favorecer empresas morenovallistas, algunas de ellas fantasmas.

Abelardo Cuéllar fue renunciado del Trabajo, en medio de señalamientos de malos manejos y prevaricato.

Y Melitón Lozano se quedó sin Educación Pública y la aspiración a Casa Aguayo, luego de la polémica por la última visita del presidente Andrés Manuel López Obrador.

Son cinco, las funcionarias del gabinete que siguen desde que arrancó la gestión barbosista:

María Teresa Castro Corro, secretaria de Planeación y Finanzas; Olivia Salomón, de Economía; Ana Laura Altamirano Pérez, de Desarrollo Rural; Beatriz Manrique Guevara, de Medio Ambiente, Desarrollo Sustentable y Ordenamiento Territorial y Verónica Vélez Macuil, coordinadora de Comunicación y Agenda Digital.