Municipios Puebla

La presencia de diversos grupos de alta vulnerabilidad en las caravanas migratorias que avanzan hacia el norte del continente obliga a los diferentes gobiernos, así como a las organizaciones civiles a coordinarse para su adecuada atención y evitar que se violenten los derechos no solo de los migrantes sino de los activistas que vigilan que se respeten estos mismos derechos.

Por lo anterior, la organización IRCA CASABIERTA que tiene su principal sede en Costa Rica, así como ArcusFoundation y Somos, Centro para el Desarrollo y la Cooperación LGBTI publicaron el “Protocolo de protección de personas defensoras de Derechos Humanos LGBTIQ en países receptores de Centroamérica” ante la necesidad de detener la violencia, el rechazo social, la discriminación y los crímenes de odio que también afectan a los defensores de este sector de la migración.

Este protocolo marca la urgencia de que los gobiernos promuevan políticas públicas de atención migratoria incluyente.

Uno de los países receptores es Costa Rica pues cobija a un gran número de personas en desplazamiento forzado y tiene más avances en materia de protección LGBTIQ y de protección a personas defensoras de derechos humanos, pero la tarea es larga cuando se habla del resto de los países que integran el denominado Triángulo Norte.

Los cruces fronterizos de El Salvador, Honduras, Guatemala y México son focos rojos tanto para la seguridad de los migrantes LGBTIQ como para quienes observan que se respeten sus derechos humanos pues también son etiquetados dentro de esta identidad de género y atacados por las mismas razones.

Sin duda es de reconocerse la labor que realizan los defensores de derechos humanos de la comunidad migrante LGBTIQ pues literalmente están salvando vidas y poniendo el ejemplo para el surgimiento de más organizaciones defensoras y sumando esfuerzos a los de todas estas organizaciones internacionales como la OIM, ACNUR, incluso Amnistía Internacional, sobre todo porque los crímenes de odio en su contra no cesan.

La publicación de este protocolo marca la pauta para terminar con las barreras que enfrentan los defensores LGBTIQ desde los tipos de registro en los cruces fronterizos como en el establecimiento de albergues temporales, así como los protocolos de emergencia que contemplen la persecución como un delito.

Las condiciones precarias que enfrentan como el hacinamiento, la falta de servicios básicos en los espacios donde permanecen varados los migrantes complican su situación y aumenta el rechazo a la comunidad LGBTIQ incluso dentro de los grupos de migrantes que permanecen en los estados fronterizos ya sea del norte o del sur de México.

La migración LGBTIQ tiene un solo objetivo, la búsqueda de lugares seguros, la búsqueda de la sobrevivencia que inicia en su propia comunidad al vivir el rechazo familiar y después en países que van recorriendo en busca de una sociedad más abierta donde prevalezcan los derechos humanos.

Desafortunadamente no todos logran el sueño americano o el de un lugar donde no sean juzgados, entonces queda en la propia fortaleza interna de cada individuo ser resiliente sobre estas experiencias de miedo y de violencia sufridas durante su movilidad.

Comentarios vía twitter: @erinife

Correo electrónico: erinife23@gmail.com