Elecciones 2018. Tehuacán en vilo
Se acerca la elección más grande en la vida democrática de nuestro país, el sistema electoral se equilibra y la carga ciudadana de votar por diferentes partidos sin menospreciar a los candidatos independientes provocará opiniones dispersas a lo largo del año, en esta elección se disputaran todos los cargos populares; presidente (a) de la República, senadores (a), diputados (a) (locales y federales) y presidentes (a) municipales, todo en un solo paquete. En relación con el desastre suscitado el pasado 19 de septiembre observamos que la inmovilidad de los partidos políticos generó una serie de disputas sobre su financiamiento público, unos má$, otros meno$, lo cierto es que en plenas pree campañas electorales aún la dinámica sea velar por interés de los aspirantes y no de las causas sociales, ¡ahora si nadie se salvo!, los discursos demagógicos fallaron y la oposición se enmudeció. ¿Si al financiamiento de partidos?, ¿Reducción de pluris? o ¿Replantear al sistema de partidos? Es evidente entonces que los partidos políticos sufren una crisis de representación política al no emitir posturas contundentes, crisis internas en algunos partidos esclarecen que las cúpulas en el poder quieren perpetuarse.
Ante la situación planteada Tehuacán se encuentra en vilo, todos los políticos de siempre alzan la mano para contender en esta elección, lo cierto es que aún no hay nada claro, los conflictos de los partidos a nivel nacional repercuten en el ámbito local, muchos de ellos se adelantan en posicionar su imagen, recorrer colonias, juntas auxiliares, familias etc, sin embargo algunos han obviando que la paridad de género será contundente, por otra parte la crisis de representación en la ciudad por el transfuguismo de actores políticos ha repercutido de forma negativa en los ciudadanos generando un cierto grado de apatía, así como también la ingobernabilidad de la ciudad por la toma de decisiones arbitrarias de la actual presidenta municipal, en fin son muchas circunstancias que muchos de ellos han obviado y que tendrá repercusiones a la hora de votar.
En suma la alternancia presidencial municipal tampoco es la vía, se debe aportar un proyecto incluyente, juventud y experiencia, de profesionalización, de enarbolar estrategias sustentables, que los partidos políticos apuesten por los miembros más competitivos, que los candidatos independientes sean serios, así los ciudadanos tengan opciones validas y decidan ir a votar, solo con voluntad se pueden generar cambios necesarios. La sinergia es que la ciudadanía participe en los temas de mayor trascendencia; la política es de tiempos y el poder excesivo dura poco. Los tiempos de oro de la ciudad han cambiado, reflexionemos el sentido democrático y construyamos la ciudad que nos merecemos