La Jornada de Oriente: graves acusaciones contra Antorcha
El día lunes 9 de enero, la página de internet de La Jornada de Oriente volvió a hacer gala del periodismo golpeador y nauseabundo que acostumbra para embestir al Movimiento Antorchista, y publicó como verídica una nota que tituló, ante el asombro de todo el mundo: “Ataca Antorcha Campesina a poblaciones en Oaxaca, reportan 11 muertos y decenas de heridos”.
¿Qué es lo que dice el texto alarmista y por el que La Jornada de Oriente pone el grito en el cielo? Según el periódico -ese “funesto” lunes 9 de enero- “los habitantes de San Juan Mixtepec, a través de un comunicado de prensa”, dijeron que “estamos siendo atacados por un grupo armado comandado por Santo Domingo Yosoñama y su asesor Antorcha Campesina (¿?), quienes están aprovechando el paro de la Policía Estatal (en Oaxaca) para entrar a nuestra comunidad; hoy entraron a dos de nuestros pueblos y capturaron a sus integrantes (¡al estilo de las tristemente célebres “policías comunitarias”!), a los niños los están separando de sus padres para llevarlos en camionetas cerradas con destino a la montaña para matarlos (¡como en la Alemania nazi!), a los padres que se oponen los están matando, llevan 11 personas asesinadas por este grupo (¡esto es una masacre digna de ser denunciada por la ONU!)”.
El increíble y alarmista “comunicado” que publicó el periódico de marras fue lanzado desde un correo electrónico con remitente anónimo, por el que nadie responde ni da fe de que sus “informaciones” sean ciertas o no. Obviamente, la información es absolutamente falsa, ya se hubiera armado el escándalo mundial con un acontecimiento de esa gravedad y magnitudes, y su publicación nos vuelve a dar la razón sobre lo que hemos denunciado desde hace muchos años: que La Jornada de Oriente es un instrumento al servicio de oscuros intereses que buscan golpear el prestigio que Antorcha ha cosechado, durante 40 años de lucha, entre importantes sectores populares, para lo cual no dudan en repetir como papagayos las informaciones más absurdas y sucias, intentando hacerlas verídicas, no importa que la fuente original sea una mente enferma que no se atreve a dar la cara públicamente, precisamente porque sabe de su crimen.
Al parecer, al señor “Jefe” de Información de La Jornada de Oriente, un oscuro personaje del que hemos hablado en escritos anteriores, le importa un comino la verdad, porque se la pasa por el arco del triunfo, y la integridad física de los antorchistas, porque con sus gravísimas publicaciones está incitando a, primero, que el Estado eche mano de la fuerza para someter a los presuntos “asesinos” y, segundo, que los caciques de San Juan Mixtepec (cuya cabecilla es el propio alcalde, un gatillero que responde al nombre de Adolfo Gómez Hernández) se sientan ahora con “derecho” a vengarse por el supuesto holocausto oaxaqueño, como veremos más adelante, y continuar con las masacres que, ellos sí, han cometido con absoluta impunidad en contra de los pobladores de Santo Domingo Yosoñama y el Movimiento Antorchista. Ésa es la gravedad de la publicación; ésa es la razón que me obliga a poner las cosas en claro.
Hace unos cuatro años, los habitantes de Santo Domingo Yosoñama, una comunidad oaxaqueña de las más pobres y olvidadas del estado, se acercaron al Movimiento Antorchista para plantearle un problema agrario. Resulta que los caciques de la comunidad vecina, San Juan Mixtepec, les habían arrebatado, abusando de su fuerza, mil 740 hectáreas de terreno. El conflicto agrario se le planteó, en la primera oportunidad que se presentó, al gobierno de Gabino Cué Monteagudo, de quien desde entonces sólo hemos escuchado promesas de solución, la última de las cuales brotó de la boca del propio gobernador el día jueves 20 de marzo de 2014, durante una reunión convocada por representantes del Gobierno federal. Pero los campesinos de Yosoñama siguen, a la fecha, esperando justicia. Sin embargo, mientras las autoridades políticas de Oaxaca y del país prometen soluciones y convocan a infructuosas mesas de diálogo, la mafia de Mixtepec ha cebado su cólera y rabia sobre los despojados, con tanta impunidad que indica que esos señores gozan de fuertes vínculos con ambos niveles de gobierno, y que por ello se les garantiza absoluta libertad de acción.
Desde mayo de 2010 a la fecha, la mafia de Mixtepec ha cometido varios crímenes entre los que se cuentan el secuestro, durante dos meses, de 39 campesinos, crimen encabezado por el entonces alcalde de Mixtepec Leonel Martínez Sánchez, comprobado por nosotros con evidencia videograbada ante las instancias judiciales (a pesar de lo cual sigue libre y todavía tuvo el descaro de fungir como representante de la Sedatu y la Sedesol en Oaxaca); también se cuenta el asesinato del distinguido luchador social Miguel Cruz José, integrante de la Dirección Nacional del Movimiento Antorchista, y el asesinato de una veintena más de pobladores de Santo Domingo Yosoñama, 11 de los cuales, entre ellos tres niños y cinco mujeres, fueron bestialmente baleados e incinerados en el paraje “Tres Cruces”, el día 14 de diciembre de 2013, cuando se transportaban en una camioneta. Todos estos actos atroces pueden ser comprobados en los archivos de la prensa oaxaqueña, poblana y nacional. ¿Quiénes son, pues, los criminales? ¡La Jornada de Oriente tiene la palabra!
Ahí no se queda la cosa y los asesinos nuevamente lanzan amenazas: hace un par de días, el alcalde de Mixtepec Adolfo Gómez amagó con crear una “policía comunitaria” como las de “Michoacán y Guerrero”, para imponer su ley de horca y cuchillo a como dé lugar. Cualquiera que no sea un idiota redomado, y que siga un poco las noticias, tiene claro la violencia y la muerte que, al margen de la ley, produjeron esas famosas “policías comunitarias”. ¿Hasta cuándo el gobierno estatal y federal le pondrán un alto? Han creado un monstruo que luego no van a poder controlar. Nuevas calumnias de la prensa, nuevas amenazas de los asesinos, ¿qué acaso en este país no hay nadie que vele por la verdad y la justicia?
Twitter: @aquilesmbrito