¿Logrará Morena superar su lucha de tribus?

Morena cada día se aleja más de la posibilidad de ser un partido con estabilidad, con institucionalidad y aunque sea medianamente cohesionado. La elección de la nueva dirigencia de esta fuerza política y el proceso de sucesión gubernamental vino a ahondar en la lucha interna de seis facciones, o mejor dicho de seis tribus, que están en franca guerra por los espacios de poder y las candidaturas que estarán en juego en 2024. Frente a esa condición hay una confrontación permanente de todos contra todos, sin que nadie tenga conciencia de que esta división abona a la posibilidad de que la oposición, en el mediano o largo plazo, pueda en Puebla desplazar a la 4T.

El problema central de Morena es que no hay una dirigencia con liderazgo, autoridad y sentido común, que evite una mayor confrontación y desgaste político.

Una situación que se puso de manifiesto con “el factor de Nacho Mier” –es decir Ignacio Mier Velazco, el coordinador parlamentario de Morena–, en su afán de intentarse adelantar a los tiempos oficiales del partido y querer crear la imagen, con su informe del sábado pasado, de que ya hay “una cargada” del ámbito federal para designarlo candidato a la gubernatura de Puebla.

Es tan reprobable la actitud asumida por Mario Delgado Carrillo, presidente nacional de Morena, como la de Olga Lucia Romero Garci Crespo, le recién electa dirigente local del Partido de Regeneración Nacional, frente al evento del sábado, en el cual Mier rindió su informe de labores legislativos y se “destapó” como aspirante a candidato.
 

Ambos, con actitudes opuestas, han roto con los principios de imparcialidad, inclusión y equidad en el proceso de selección de Morena del próximo abanderado que competirá, a nombre de la 4T, por la titularidad del Poder Ejecutivo de Puebla.

Cuando falta casi un año para la elección del candidato, los dos dirigentes tendrían que estar trabajando en la unidad partidista y no contribuir más a la confrontación. Un principio básico que deberían cuidar como una “caja de cristal” es el de la imparcialidad y es el aspecto que más descuidaron.

Es reprobable que Mario Delgado haya mostrado una actitud parcial el sábado pasado y abiertamente exhibiera sus simpatías por Ignacio Mier, en detrimento de otros 5 aspirantes que buscan ganar la nominación.

Y es igual de reprobable, que ayer Olga Lucia Romero salga a descalificar a Ignacio Mier, diciendo que no se permitirá su imposición y que representa al “viejo régimen”, cuando tendría que dar respeto y trato equitativo a todos los aspirantes a la nominación.

Delgado y Romero tendrían, como mínimo, generar “un piso parejo” para todos los aspirantes a la candidatura y evitar cualquier ataque, descalificación, señalamiento, simpatía o favoritismo. Sobre todo, cuando está todavía muy alejado el plazo para levantar las encuestas que decidirán quien será el elegido de la 4T.

Las seis tribus

Morena se ha “perredizado”, es un cometario acertado y generalizado que se menciona con insistencia dentro y fuera del partido, en alusión a que el PRD –en su momento– perdió el rumbo como fuerza política de izquierda por la guerra interna de sus tribus. Ahora ese modelo se está reproduciendo en el Partido de Regeneración Nacional.

No solamente hay una confrontación entre la corriente del gobernador Luis Miguel Barbosa Huerta y de Ignacio Mier Velazco. También hay diferencias insalvables entre el grupo de Mier y del senador Alejandro Armenta Mier.

Si antes de la elección interna de consejeros, Morena en Puebla ya tenía divisiones, en algunos casos irreconciliables, tras el caótico proceso, el actual partido oficial terminó por “perredizarse”.

En efecto, el síndrome de las tribus que tanto aquejó al instituto del sol azteca es ahora el sello de la casa en el Movimiento de Regeneración Nacional.

Los golpes directos entre los líderes cupulares en Morena son de dominio público.

Pero hay que poner atención a lo que en las bases sucede, pues si los militantes de a pie no se sorrajan directo, sí han pintado su raya y han comenzado sus movimientos cada quién por su lado.

Por ejemplo, el pasado fin de semana se reunieron al rededor de media centena de liderazgos de base en un salón de fiestas de la capital poblana. Entre ellos estaban dirigentes de larga trayectoria y experiencia como María del Consuelo Valle Espinosa, quien tiene mucha influencia en la región de Cuetzalan del Progreso; Marco Alonso Aco Ramírez, luchador social de Huitzilan de Serdán, y Óscar Toquero, fundador de los Defensores de la 4T Cuautlancingo. También acudieron nuevas figuras del morenismo local, como Lluvia García Vilchis, exdirigente del YoSoy132 Puebla y hermana de Liz García Vilchis, la titular del espacio Quién es Quién en las Mentiras de la conferencia mañanera presidencial.

Según lo publicado en la página de Facebook “Libertad de Opinión”, estos liderazgos buscan rescatar a Morena de prácticas priistas como la que realizó Ignacio Mier Velazco, el sábado pasado, para su cuarto informe de labores como diputado federal.

Por otro lado, este martes por la tarde se reunieron en La Casa del Movimiento, integrantes del grupo que encabezó la exedil de Puebla Claudia Rivera Vivanco, como su mamá, Eloísa Vivanco Esquide, presidenta de la Comisión Nacional de Honestidad y Justicia de Morena, así como el líder de los regidores de ese partido en el ayuntamiento de Puebla, Leobardo Rodríguez Juárez, junto con sus compañeros, Ernesto Aguilar Yordi y Elisa Molina Rivera, entre otros.

Todos acudieron a una conferencia de Rafael Barajas “El Fisgón”, pero desde hace tiempo vienen haciendo labor por su lado y confrontándose, con las demás tribus.

Del otro lado está la gente de Alejandro Carvajal, el diputado federal que aspira a la presidencia municipal, que tiene su propia agenda y muchos seguidores, pero no se mezcla con otras tribus que no sean las de su fiel escudero, Gerardo López Ramírez.

Hay que reconocer que Carvajal es un diputado que trabaja en la Cámara Baja, presentando iniciativas y debatiendo, pero también recorriendo a pie lugares, la gente lo conoce. A esa fortaleza se suma una muy buena estrategia de redes sociales.