México...Estado fallido; hay Ley de la Selva: Jesuitas

El asesinato de dos jesuitas en Chihuahua es un punto de quiebre de la endeble relación entre el Papa Francisco, los jesuitas y la jerarquía de la Iglesia Católica con Andrés Manuel López Obrador.
 
Y en el camino a la elección Presidencial del 2024, los caso 20 mil ministros, entre obispos, arzobispos y cardenales, religiosos y sacerdotes, “van a tener sus reservas de apoyar al candidato de Morena”.
 
En México, la Universidad Iberoamericana, el ITESO de Guadalajara y la obra social de los jesuitas, “apoyaron la campaña y al gobierno de López Obrador; y pese a que no se sintieron escuchados en estos primeros años, el apoyo se mantuvo”.
 
Pero la muerte de dos de los suyos es un asunto personal para los seguidores de la congregación religiosa fundada por Ignacio de Loyola en el siglo XVI.
 
Ello muestra que lo que “en el pasado fue una alianza, hoy se vea como ruptura”.
 
Y este rompimiento no es menor.
 
En la alternancia electoral de los últimos cuatro gobiernos –Zedillo, Fox, Calderón y Peña-, la Iglesia Católica y sus 14 arquidiócesis, que abarcan 5 mil parroquias, “tuvieron una influencia importante en la orientación a sus fieles sobre los candidatos que mejor representan la forma de pensar de los católicos”, escribió el periodista Darío Célis en su columna “La Cuarta Transformación” de El Financiero.
 
YA NO ALCANZAN LOS ABRAZOS PARA TANTOS BALAZOS
 
El padre jesuita Javier Ávila soltó: “Ya no alcanzan los abrazos para tantos balazos. Están rebasados los abrazos, entonces son inútiles y no es el camino para conseguir la paz”.
 
Describió a sus compañeros Javier Campos y Joaquín Mora como muy buenos pastores, sencillos, de mucha fe, mucho trabajo y muy cercanos al pueblo.
 
Remató:
 
“Nunca nos han doblado. Ni doblarán a la congregación jesuita”.
 
MÉXICO… ESTADO FALLIDO
 
Rectores y directores del Sistema Universitario Jesuita advirtieron que el Estado Mexicano no ha logrado tener un control territorial, lo que “genera un Estado fallido”; además de que hay un abandono hacia la sociedad, donde impera la “ley del más fuerte” y la “ley de la selva”.
 
Es lamentable que el Plan Nacional de Paz del Presidente Andrés Manuel López Obrador se haya reducido a la creación de la Guardia Nacional, de corte militar, que no ha servido para controlar la violencia.
 
Cuando el Estado no tiene control territorial y permite que grupos armados lo controlen, a eso llamamos Estado Fallido.
 
“Y tiene muchos años que desgraciadamente en México el territorio, las colonias, los barrios, los pueblos, están siendo controlados por algún cártel y el Estado está ausente”, lamentó el Rector de la Universidad Iberoamericana de Torreón, Juan Luis Hernández.
 
Espetó que “la población en México estamos solos, abandonados a nuestra suerte, sometidos a la ley del más fuerte, sometidos a la ley de la selva; sometidos a la ley del secuestro, de la extorsión, del asesinato”.
 
A CRIMINALES SE LES DEBE PROTEGER SUS DERECHOS
 
Lo anterior es derivado del discurso de López Obrador, quien en diversos actos ha referido que “a los narcotraficantes y criminales se les deben proteger sus derechos… porque también son seres humanos”.
 
Así, las bandas criminales hacen y deshacen, desde masacrar a niños y mujeres afuera de una escuela en Salamanca, Guanajuato; acribillar a vendedores de pollo en el mercado de Chilpancingo, Guerrero; asesinar a un comerciante del mercado de Celaya por oponerse a pagar el “derecho de piso” a integrantes del Cártel Jalisco Nuevo Generación.
 
O las 10 personas ejecutadas en Atlixco y los 5 asesinados en Ciudad Serdán; o el reciente linchamiento del abogado Picazo González por una turba en Huauchinango.
 
Con el agregado:
 
Del primero de diciembre 2018 al 30 de abril de 2022, lapso que lleva gobernado Andrés Manuel López Obrador, van 118 mil 732 crímenes dolosos, de acuerdo a cifras oficiales del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública –SESNSP- del Gobierno Federal.
 
Estadística que iguala el sexenio de Felipe Calderón, que sumó 120 mil asesinatos, y está por alcanzar los 156 mil de la gestión de Peña Nieto, con la pequeña diferencia que a López Obrador le falta año y medio de gobierno.
 
Y la “cereza” del gabinete de Seguridad Federal:
 
Rosa Icela Rodríguez, Secretaria de Seguridad Ciudadana, sustituyó a Alfonso Durazo, actual mandatario de Sonora.
 
Ricardo Mejía Berdeja, subsecretario de Seguridad en campaña por obtener la candidatura de Morena al Gobierno de Coahuila.
 
Clara Luz Flores, candidata perdedora al Gobierno de Nuevo León, acaba de ser nombrada titular del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública –SESNSP-, relevó a Leonel Cota Montaño, quien pasó a dirigir Seguridad Alimentaria –
SEGALMEX-
 
Con esos perfiles y un Presidente de México obstinado en su política de “abrazos y no balazos”… el país continuará bañándose en sangre bajo una estela de terror y horror.
 
¿Qué hará la Comunidad Jesuita?
 
Al tiempo.