Un entierro de 2 mil años fue encontrado en Tepeyahualco

A seis kilómetros de la zona arqueológico de Cantona, Puebla, fue localizado un entierro humano múltiple y tiestos o recipientes asociados de la fase Cantona  Tardío, del año 300 A.C.-50 D.C., en el interior de una tumba troncocónica, es decir, en forma de botella, la primera en su tipo localizada al exterior de ese sitio.

Por la cercanía con Cantona, el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), infiere que los restos óseos corresponden a esa misma cultura con una antigüedad de dos mil años.

Análisis previos apuntan a que el entierro se compone de cuatro individuos adultos jóvenes; los  restos óseos no guardaban su posición anatómica y estaban en mal estado de conservación, a excepción de la última capa, donde se detectó una osamenta en mejores condiciones.

El hallazgo lo dio a conocer la Secretaría de Cultura del Gobierno Federal, hace un par de meses, a través de los arqueólogos del Centro INAH Puebla, María de la Luz Aguilar Rojas y Alberto Diez Barroso Repizo, quienes acudieron al lugar a solicitud de la Fiscalía General del Estado de Puebla.

Los entierros fueron localizados por pobladores de Tepeyahualco, a un costado de un camino de terracería en las afueras de la cabecera municipal.

Según el informe, el entierro ha sido excavado por los especialistas del INAH con apoyo de la comunidad y los materiales se llevaron al Laboratorio de Arqueología del Centro INAH Puebla, donde reciben tratamientos de conservación y son estudiados.

De acuerdo con un análisis preliminar, explicó Alberto Diez, los tiestos o recipientes colectados, asociados al enterramiento, son ubicados cronológicamente para la fase Cantona I Tardío, aunque en los niveles superiores, al exterior del montículo se halló un fragmento de un vaso cuya cronología es muy amplia, ya que se ha detectado entre los periodos Cantona I Tardío y Cantona III (150 a.C.–900 d.C.).

Las características del entierro, corresponde al año 300 A.C. y se han localizado al sur de la Cuenca de México, en Cuicuilco y en la región de occidente, en Guanajuato y Michoacán.

Las dimensiones de la tumba con forma de botella, era de 1.60 metros de altura, cuyo diámetro en la base es de 97 centímetros, hasta llegar a 45 centímetros.

El hallazgo de este sistema de enterramientos al sur de Cantona, permite inferir que desde las primeras fases de ocupación de la ciudad prehispánica, su tamaño abarcaba una gran extensión y que sus pobladores asentados en la periferia efectuaban prácticas funerarias complejas, así como costumbres recurrentes en el continente americano desde la antigüedad, como la deformación craneana, indicaron los investigadores.

El análisis de la superficie y las características geográficas de la región de Tepeyahualco, muestran la abundancia de paisaje rocoso que puede albergar este tipo de sistemas de enterramiento prehispánico, por lo que sus actuales pobladores se han mostrado participativos y preocupados por el cuidado de la tumba y de su patrimonio arqueológico.

leticia_montagner@hotmail.com

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Leticia Montagner

Leticia Montagner es licenciada en Periodismo y tiene la maestría en Periodismo Político por la Escuela de Periodismo Carlos Septién García. Doctorada en Derecho y Género. Fue catedrática de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla y de la Escuela de Periodismo Carlos Septién García. Es pionera en Puebla de noticiarios y programas radiofónicos con perspectiva de género desde 1997. Conductora de programas de radio y televisión en Puebla. Actualmente es catedrática de la Facultad de Ciencias de la Comunicación de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, escribe una columna política los miércoles en El Sol de Puebla y conduce la Revista ABC en ABC Radio 1280 de AM.