Con o sin Morena, Barbosa buscará mantener la mayoría en el Congreso local

Las reuniones que Luis Miguel Barbosa Huerta ha sostenido con los dirigentes nacionales de Morena de cara a la renovación de sus órganos estatales y la designación de candidatos a cargos de elección popular no han concluido en buenos términos.

Más bien han sido desencuentros.

La petición del gobernador de llevar mano en la designación de candidatos locales a presidentes municipales y diputados al Congreso del estado, no ha sido bien recibida por el enlace del CEN de Morena, Carlos Alberto Evangelista Aniceto, y tampoco por el dirigente nacional Alfonso Ramírez Cuéllar.

Barbosa Huerta tampoco ha recibido de buen agrado la negativa de los dirigentes de Morena para aplazar la elección de los consejeros estatales y nacionales, lo que finalmente ha ocurrido por la emergencia sanitaria, ni la conformación de la mesa política que hace las veces de Comité Ejecutivo Estatal.

Por esa razón es que el mandatario estatal ha tomado la decisión de tomar distancia de los procesos internos de Morena y de trazar su propia ruta para mantener la mayoría en el Congreso, con o sin Morena, y de ganar los ayuntamientos de los principales municipios de la entidad a través de Morena u otros partidos políticos.

Eso explica por qué en algunos municipios sus operadores electorales y de tierra, entre ellos Eric Cotoñeto Carmona, Lizeth Sánchez García y Gabriel Biestro Medinilla, han mostrado su respaldo a presidentes municipales en funciones para que se reelijan por el PRI, el PT, Compromiso por Puebla (CPP), Pacto Social de Integración (PSI), el desaparecido Partido Encuentro Social (PES) e incluso el PAN y MC.

El gobernador Barbosa sabe que con Alfonso Ramírez Cuéllar o Bertha Luján Uranga en la dirigencia nacional de Morena, sus posibilidades de influir en la designación de candidatos son mínimas.

No así si el elegido por militantes y simpatizantes de Morena, en la encuesta que aplicará el Instituto Nacional Electoral (INE) para determinar quién debe suceder a Ramírez Cuéllar en la dirigencia nacional de este partido, favorece al diputado federal Mario Delgado Carrillo.

Con Mario Carrillo, Barbosa tendría mayor margen de operación en la designación de los candidatos de Morena, pero no manga ancha, por lo que independientemente de quién gane la encuesta de este partido el gobernador ya tiene previsto qué hacer y con qué candidatos ir a los comicios intermedios de 2021 sean o no candidatos de Morena.

¿O me equivoco?

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