Migrantes muertos en costas mexicanas

Las imágenes que pensábamos lejanas en el mediterráneo donde constantemente naufragan navíos con decenas y hasta centenas de migrantes que agotan sus esperanzas de una nueva oportunidad de vida con fronteras cerradas y gobiernos que se niegan a darles asilo, se viven ya en costas mexicanas y están cobrando sus primeras víctimas en un panorama de cerrazón gubernamental similar.

Este fin de semana aparecieron los primeros cuerpos de migrantes de origen africano en costas de Tonalá, Chiapas, los números oficiales distan mucho de los que tienen organizaciones de apoyo a migrantes.

Y es que ante la presión y el cierre de fronteras que está ejerciendo el gobierno federal mexicano después de la solicitud del mandatario norteamericano, Donald Trump, de contener a los migrantes que provienen del sur del continente, ciudadanos de Camerún y el Congo, por ejemplo, están tomando una vía alternativa para ascender en territorio mexicano rumbo al sueño americano.

Pagando cuotas que van desde los 400 hasta los mil 500 dólares por persona, se transportan a través de balsas o lanchas desde las costas de Guatemala hasta llegar a Huatulco o Salina Cruz, en Oaxaca y desde ahí continúan su recorrido hacía el norte del país a bordo de La Bestia.

Por lo anterior, la administración federal de Enrique Peña Nieto decidió cancelar la ruta Arriaga-Ixtepec de este tren con el fin de desaparecer una alternativa importante de llegada de los migrantes en la región del Istmo de Tehuantepec, pero fue reabierta por la gestión morenista actual.

Medida que se contrapone al programa de contención de migrantes anunciado por la Secretaría de Gobernación, pues al reabrir esta ruta abrieron también la puerta para que los migrantes vean en esa región oaxaqueña una opción para continuar su camino.

Mientras, en la frontera sur, el gobierno mexicano sigue resguardando a los miles de indocumentados en albergues donde viven hacinados por meses y se niega a otorgarles los documentos de salida del país para continuar su viaje, obligando a los que vienen en camino, a tomar nuevas rutas, tan peligrosas, como el mar mexicano.

Y como reza el refrán: “a río revuelto, ganancia de pescadores”, porque en toda esta situación caótica migratoria los que están ganando son los grupos del crimen organizado pues la organización civil “La 72 Hogar-Refugio para personas migrantes” en Tabasco denunció el “alarmante incremento en el número de secuestros” en lugares como Tenosique, afectando también a los migrantes quienes, en algunos casos, se han visto obligados a pagar hasta 6 mil dólares para ser liberados.

En la frontera norte, aproximadamente 500 hondureños colapsaron el puente internacional de Matamoros, Tamaulipas para denunciar que fueron deportados por Estados Unidos bajo la promesa de que en nuestro país se les otorgaría albergue digno o recursos para regresar a sus comunidades, como parte del programa acordado entre ambos países denominado “Permanecer en México”, promesa que no se ha cumplido y que mantiene al gobierno federal en una total apatía e inoperatividad ante la crisis humanitaria que se vive en ambas fronteras.

Comentarios vía twitter: @erinife

Correo electrónico: erinife23@gmail.com

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Érika Nieto

Es Licenciada en Ciencias de la Comunicación y Maestra en Administración, por la UPAEP. Fue reportera del Periódico AL de Puebla y del Noticiero Revista 105 en La Radiante 105. Fue corresponsal para medios de comunicación en Puebla, San Luis Potosí y Chiapas desde la ciudad de Nueva York en Estados Unidos, durante los ataques terroristas del 11 de Septiembre de 2001 a las Torres Gemelas.

También se especializó en el tema de Migrantes durante su paso por la Administración Pública promoviendo el enlace con las diferentes organizaciones de poblanos en el exterior y el Gobierno del Estado. Además es especialista en el área de Relaciones Públicas.