Una cuestión que los diferentes sectores y organizaciones deben comenzar a plantear a Luis Miguel Barbosa Huerta y ya es quiénes integrarán su gabinete.
No se vale que diga que colocará al frente de las distintas secretarias, dependencias y organismos de la administración pública estatal a los mejores perfiles, a personas honestas, eficaces y que amen a Puebla.
Para que esta promesa de campaña se convierta en realidad, lo ideal es que estos personajes pasen la prueba del ácido, que no es otra que el filtro de la opinión pública.
Es necesario que nos diga quiénes son, aunque no precise qué secretarías ocuparán, que defina con nombre y apellido quiénes lo acompañarán en su gabinete legal y ampliado para que sepamos —en función de sus trayectorias, atributos y talentos— hasta dónde llegará el cambio prometido y los vientos de la llamada Cuarta Transformación en la entidad.
Si el lema de su campaña es la reconciliación con paz y bienestar, lo conveniente sería que el candidato de la coalición Juntos Haremos Historia nos diga con quién piensa llevar a cabo la operación cicatriz que emprenderá a partir del 1 de agosto cuando rinda protesta como gobernador, quién será el encargado de cancelar odios y rencores.
Suponemos que buena parte de esa tarea recaerá en el titular de la política interna, es decir en el titular de la Secretaría General de Gobierno (SGG). La pregunta es: ¿repetirá Fernando Manzanilla Prieto en esa dependencia?
Como lo hizo el presidente Andrés Manuel López Obrador en la contienda por la presidencia de la República, Barbosa debería informar a los poblanos con quiénes tiene proyectado gobernar en los cinco años que restan al sexenio 2019-2024.
Lo ideal sería que antes de las elecciones del primer domingo de junio nos diga quién tendrá la responsabilidad de trabajar por la paz, la tranquilidad y la seguridad de quienes vivimos en la entidad, o sea quién será su secretario o secretaria de Seguridad Pública y a quién propondrá como titular de la Fiscalía General del Estado y con quiénes tiene proyectado lograr el bienestar que promete en el estado, es decir, quiénes serán sus secretarios de Finanzas, Desarrollo Social, Economía y Desarrollo Rural.
Quizás así logre entusiasmar a los poblanos y convencerlos de salir al votar el 2 de junio, para vencer el abstencionismo que se prevé y que algunos expertos creen que podría llegar a rondar el 60%.
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La Liga de Comunidades Agrarias y Sindicatos Campesinos convocó este martes a una reunión de emergencia a favor del candidato del PRI a la gubernatura, Alberto Jiménez Merino, la que se supone que presidirá el presidente de la Confederación Nacional Campesina (CNC), Ismael Hernández Deras, y a la que fueron convocados los 32 dirigentes de las filiales cenecistas del país.
La reunión tiene tintes de desesperación, luego que la semana pasada, la ex dirigente de la CNC Puebla, Maritza Marín Marcelo, se sumó al candidato de Juntos Haremos Historia, Luis Miguel Barbosa, y con ella se llevó a los principales cuadros de esta organización, a excepción de los plataneros, los líderes juveniles de la Vanguardia Agrarista y las dirigencias nacionales que, bajo su gestión, consiguió Puebla, como los productores de tuna, nopal y maguey.
La dirigencia estatal cenecista, que está a cargo de Elías Pérez, tiene la presión de demostrarle apoyo a Jiménez Merino, luego del enorme boquete que les dejó la ex diputada local y el músculo que demostró al realizar un acto de apoyo con 4 mil 500 campesinos, el martes de la semana pasada a Barbosa.
En la reunión y en una conferencia de prensa, se espera ya un rosario de descalificaciones para la ahora líder del Movimiento Agrarista Emiliano Zapata, afín al barbosismo.
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