Para el Presidente de Estados Unidos el muro en la frontera con México se hace y se termina a como dé lugar. Y es que ya advirtió que no le importa ir de Corte en Corte porque ganará la batalla para defender a su país de lo que él y sus correligionarios consideran una “emergencia nacional”. Es decir, defender a Norteamérica de la “invasión de pandillas, de narcotraficantes, de asesinos y de la entrada de drogas”.
Porque eso es lo que llega desde México, según él, drogas, delincuentes y muchos indocumentados que representan un peligro para los estadounidenses.
Así que, ante el rechazo de los legisladores Demócratas, Donald Trump calificó la construcción de un muro fronterizo como una emergencia nacional que usará recursos públicos destinados a la milicia, principalmente para atender desastres naturales. Y ya no serán 5 mil millones sino hasta 8 mil los que necesitará para cumplir su promesa de campaña, porque apostará todo rumbo a su reelección en el 2020.
No importa que los mexicanos sean calificados de delincuentes y de personas peligrosas para Estados Unidos, de cualquier forma, en México hay un gobierno al que le está agradeciendo su apoyo por retener a los migrantes centroamericanos para que no lleguen a solicitarle asilo. Un gobierno que además no hace mucho ruido por la aplicación de esta política migratoria que daña la imagen de nuestros paisanos.
Por cierto, para Donald Trump ya no es construir un muro, sino, terminar el que hay, así que al parecer también brincará todas las recomendaciones y hasta rechazo que hay de parte de organizaciones protectoras del medio ambiente y de la fauna sobre el grave daño que representará la construcción de un muro en zonas donde actualmente solo hay estacas con alambre de puas, tierras con tantos peligros que pocos migrantes se atreven a cruzar.
Del asilo al caos
Y hablando del “favor” que según Donald Trump le está haciendo Gobierno de México, reteniendo a los indocumentados centroamericanos para que no lleguen a pedirle asilo, se está generando un verdadero caos en albergues como el de Piedras Negras en Coahuila, en el que elementos de la policía tienen ordenes de que únicamente aquellos migrantes que tienen su permiso para transitar por territorio mexicano rumbo al sueño americano, son los que pueden entrar y salir de la bodega adaptada como albergue, el resto se mantiene encerrado y en una total desesperación bajo la promesa de que en los próximos días llegarán más permisos.
Además, la crisis en la frontera, del lado mexicano, podría agravarse con el regreso, en estos días, de miles de centroamericanos que entraron a Estados Unidos a pedir asilo y que ahora son devueltos a México para que esperen a que llegue su fecha legal para iniciar con su proceso, mismo que podría tardar de 3 a 5 años.
Es importante saber si el gobierno de México se mantendrá en la promesa de que esos permisos, que son vigentes solo por un año, otorgarán trabajo y asilo a los miles de paisanos centroamericanos durante todo el plazo de espera o ya mínimo que den a conocer la estrategia a seguir con la presencia de los integrantes de estas caravanas.
Comentarios vía twitter: @erinife
Correo electrónico: erinife23@gmail.com
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Es Licenciada en Ciencias de la Comunicación y Maestra en Administración, por la UPAEP. Fue reportera del Periódico AL de Puebla y del Noticiero Revista 105 en La Radiante 105. Fue corresponsal para medios de comunicación en Puebla, San Luis Potosí y Chiapas desde la ciudad de Nueva York en Estados Unidos, durante los ataques terroristas del 11 de Septiembre de 2001 a las Torres Gemelas.
También se especializó en el tema de Migrantes durante su paso por la Administración Pública promoviendo el enlace con las diferentes organizaciones de poblanos en el exterior y el Gobierno del Estado. Además es especialista en el área de Relaciones Públicas.
