Las amenazas de campaña del Republicano Donald Trump están a un paso de convertirse en realidad. La construcción de un muro fronterizo reforzado, más alto, más vigilado, no importa que dañe, incluso a cientos de especies animales arriesgándolas a su extinción; la deportación de aproximadamente 11 millones de indocumentados latinos que estudian o trabajan actualmente en territorio norteamericano.
La suspensión de programas de apoyo a estudiantes indocumentados como el DACA y el DAPA; la anulación del derecho que actualmente tienen los nacidos en Estados Unidos de ser reconocidos como ciudadanos norteamericanos aún si sus padres son indocumentados; el recorte de la cantidad de beneficiados con “Green cards” o permisos temporales de trabajo.
Así como la reducción de los programas de empleo temporal para trabajadores agrícolas, a través de los cuales resultan beneficiados una o dos veces al año miles de mexicanos principalmente para viajar a las cosechas de estados como California. Independientemente de la promesa de que la Casa Blanca triplicará el presupuesto asignado a las autoridades migratorias y de seguridad fronteriza para disminuir la migración ilegal.
Y no olvidemos mencionar que desaparece por completo la posibilidad de una Reforma Migratoria, por lo menos, durante los próximos 4 años que dure el mandato del Presidente Electo, Donald J. Trump.
A partir de que se declaró oficialmente el triunfo electoral del empresario multimillonario en las pasadas elecciones del 8 de noviembre, prevalece la incertidumbre entre la comunidad migrante que radica en cada rincón de la Unión Americana. Decenas de asociaciones civiles pro-inmigrantes expresaron su preocupación por las medidas que tomará el mandatario electo en contra de las comunidades migrantes.
Con hashtags como “Here to Stay”, miles de indocumentados adheridos a estas asociaciones civiles expresaron a través de las redes sociales, que mantendrán su lucha inmigrante para permanecer, hasta la últimas consecuencias, en la que ya consideran su casa, su país, Estados Unidos.
Y que no abandonarán sus esfuerzos para que se mantengan apoyos, principalmente, para aquellos menores y jóvenes estudiantes que se esfuerzan por sacar adelante su formación escolar con el sueño de lograr una carrera profesional, su sueño americano.
Es cierto, muchas familias de indocumentados que viven en estados como Chicago, Texas, Arizona, California o Nueva York tenían la esperanza de que llegara la Demócrata, Hillary Clinton y les ofreciera una nueva oportunidad para mantenerse en ese país, ahora que Donald Trump llegó al poder no esperarán a que sus amenazas se ejecuten para abandonar Estados Unidos y han decidido regresar a sus comunidades antes de que inicie su gestión en 2017.
La pesadilla llamada Donald Trump se convirtió en realidad y está a unos meses de tener el poder y los recursos necesarios para ejecutar todas y cada una de sus propuestas de campaña, aquellas en las que el odio, la discriminación y el racismo solo adornan los calificativos en contra de México y los mexicanos.
Para Estados Unidos será una limpia de inmigrantes, para México el caos migratorio.
Comentarios vía twitter: @erinife
Correo electrónico: erinife23@gmail.com
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Es Licenciada en Ciencias de la Comunicación y Maestra en Administración, por la UPAEP. Fue reportera del Periódico AL de Puebla y del Noticiero Revista 105 en La Radiante 105. Fue corresponsal para medios de comunicación en Puebla, San Luis Potosí y Chiapas desde la ciudad de Nueva York en Estados Unidos, durante los ataques terroristas del 11 de Septiembre de 2001 a las Torres Gemelas.
También se especializó en el tema de Migrantes durante su paso por la Administración Pública promoviendo el enlace con las diferentes organizaciones de poblanos en el exterior y el Gobierno del Estado. Además es especialista en el área de Relaciones Públicas.