Municipios Puebla

Colaboración Érika Nieto
 

Más allá de la polémica y comentarios que sigue generando la presencia del candidato del Partido Republicano a la Presidencia de los Estados Unidos, Donald Trump en Los Pinos para reunirse con el Presidente Enrique Peña Nieto, cada día se ven, más claramente, los serios problemas que podrían enfrentar millones de mexicanos que radican, legal e ilegalmente en territorio norteamericano si Trump gana la elección del próximo 8 de noviembre.

Las encuestas como la última publicada por The New York Times, lo dicen, Donald Trump sigue en la carrera por la Casa Blanca no muy lejano a la Demócrata Hillary Clinton, los 5 o 6 puntos de diferencia que llevan ambos contrincantes pueden cambiar en el momento de la votación.

La insistencia sobre la construcción del muro pagado por México va mucho más allá de la burla permanente que hace el multimillonario ante sus seguidores, también la deportación de más de 16 millones de indocumentados y el retiro de programas como el DACA y DAPA que actualmente benefician a casi 5 millones de niños y jóvenes estudiantes sin ciudadanía ni residencia en ese país, son las promesas firmes de Donald Trump para ser ejecutadas en las primeras horas de su mandato, como él mismo asegura.

Sin embargo y pese a todo lo anterior, el verdadero problema que enfrentan los mexicanos en Estados Unidos es que en México no hay una sola autoridad, empezando por su Presidente y siguiendo por el gabinete, el Senado y el Congreso que tenga el interés y el poder para defender a capa y espada los derechos e intereses de los connacionales.

Independientemente de los comentarios y críticas en redes sociales o en foros públicos no hay autoridad mexicana que emprenda un plan concreto y bien aterrizado de defensa para esos millones de mexicanos que ya de por sí se ven perseguidos en la Unión Americana.

Mucho menos, ante estas claras amenazas, hay autoridad alguna en todo el país que se esté preparando para recibir a esos millones de paisanos que se verían obligados a regresar, no lo han hecho con las deportaciones masivas que ejecuta el Presidente Barack Obama desde el inicio de su gestión y no lo harán ante los próximos resultados de la elección presidencial de noviembre próximo en Estados Unidos.

Mientras tanto, Donald Trump y personajes tan significativos para los americanos como Rodolfo Giuliani (quien enfrento los ataques del 11 de septiembre en Nueva York en aquel 2001) ahora dicen que también harán de México un gran país (Make México great again also) mofándose de la propia soberanía nacional ante la nula defensa por parte de su mandatario.   

El diScurso de Donald Trump en materia migratoria expresado en Arizona, estado significativo en este tema por ser donde prevalecen los grupos “caza indocumentados”, es claro y contundente, de llegar a la Presidencia hará mucho más de daño que el propia Barack Obama con sus redadas y deportaciones a quienes solo buscan el sueño americano para mejorar su calidad de vida, hoy más que nunca es importante y fundamental que los millones de mexico-americanos que tienen la capacidad de emitir su voto lo hagan en defensa de sus propios connacionales el próximo 8 de noviembre. 

Comentarios vía twitter: @erinife

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