Izúcar de Matamoros, Pue.- Familiares de los internos de Izúcar de Matamoros que fueron trasladados a Puebla, tras el sismo del 19 de septiembre del año pasado, por los daños que tuvo el Centro de Readaptación Social, ahora piden los regresen a la Mixteca porque las visitas al penal de San Miguel les representa mayores gastos.

Mary “N”, familiar de un interno, comentó que para ella le es muy complicado viajar a la ciudad de Puebla, ya que esto le genera gastos. En cada ida, invierte mínimo entre 300 y 500 pesos. Antes iba una vez a la semana, pero ahora tuvo que optar por hacerlo esporádicamente.

Indicó que hace un año, que se llevaron a los internos, el ayuntamiento les apoyaba con el transporte hasta el Cereso de San Miguel dos veces por semana, después lo redujo a un día, y actualmente este servicio a veces lo dan y a veces ya no.

Expresó que con el cambio de administración no sabe si continuarán brindando este apoyo a los familiares de los internos.

Además de los gastos para ir a ver al familiar, se suma el dinero que a veces les dejan porque los internos se quejan que en San Miguel por todo tienen que pagar, hecho que no sucedía en Izúcar de Matamoros. Pagan por el agua, por bañarse, y si requieren de algo, todo tiene un costo en ese lugar, denunció.

Debido a lo anterior, familias de reos han señalado que las autoridades inmediatamente tienen que poner solución a la problemática. Piden construyan un nuevo Cereso en Izúcar o en algún otro punto de la región, ya que con ello, la visita a sus internos será mucho más fácil.

Las familias de reos enfatizaron que las autoridades municipales y estatales los olvidaron, porque nadie habla sobre un nuevo Cereso en la zona de Izúcar.

Hay que recordar que del Cereso de Izúcar de Matamoros, que se ubicada al interior del ex palacio municipal que data del siglo XVI,  un total de 185 presos, entre ellos 15 mujeres, fueron trasladados  en medio  de un fuerte operativo de seguridad, la noche del mismo 19 de septiembre del 2017, rumbo al Cereso de San Miguel. Desde ese entonces, sus familias los visitan en aquel lugar, y no saben cuándo regresarán.

De acuerdo a información recabada, el Cereso de Izúcar de Matamoros estuvo a punto de colapsar, aunque no se ha permitido el acceso a medios de comunicación, trascendió que en este lugar, varias columnas se encuentran muy dañadas y estuvieron a punto de colapsar.

Fotografía Lidchy Cano

clh