La fijación de aranceles del 25% y 10% a productos mexicanos como el acero y aluminio sí encarecerá estos y otros insumos de consumo local, advirtió Francisco Romero Serrano, presidente del Sindicato Nacional de Empresarios de México (Sindemex).

En rueda de prensa, dijo que el incremento a distintos productos, bienes y servicios que se compartan entre ambas naciones perjudicará al consumidor final, aunque no precisó en qué orden podrían prestarse estos ajustes.

“En la construcción habrá impactos inmediatos en el acero y el aluminio debido a los aranceles. También se afectarán insumos como alimentos para la engorda de aves y cerdos, repercusiones en el costo de producción, cárnicos y embutidos”, abundó el empresario.

Romero Serrano reconoció que, después de esta política arancelaria, prevalecerá el nerviosismo entre empresarios y gobiernos, pues se envió un mensaje del inicio de la guerra arancelaria que no permitirá definir el Tratado de Libre Comercio de América Latina (TLCAN) en el corto plazo.

De acuerdo con los representantes de los sectores automotriz y metalmecánico, no hay motivos para que los acereros aumenten el precio de sus productos, dado que no serán ellos quienes paguen un excedente por la exportación de sus materiales.

Estados Unidos tiene un consumo interno de 106 millones de toneladas, de las cuales 34 millones son importadas y 60% de este volumen procede de Canadá, México Brasil, Corea del Sur y Rusia, informaron previamente socios de Canacintra.

Con información de Ana Fernández