Las cifras reales de feminicidios en Puebla se ocultan para no afectar el “estatus” o “prestigio” del gobernador, acusó Lourdes Pérez Oseguera, directora del Observatorio de Violencia Social y de Género del Instituto de Derechos Humanos Ignacio Ellacuría (IDHIE).

Durante su participación en las Jornadas para la Equidad de Género que desarrolló el Instituto Tecnológico de Monterrey Campus Puebla, la activista reportó, con base en el seguimiento que el observatorio ha dado a los casos, que de 2012 a 2017 el número de feminicidios creció 60 por ciento.

Detalló que en 2012, el observatorio contabilizó 64 casos, en 2013 68, 72 en 2014, 81 en 2015; 85 en 2016 y 106 a lo largo de 2017.

“Nosotros estamos haciendo un seguimiento desde 2012, llevando un conteo pero también haciendo un análisis de cada caso a lo que marca la misma ley o estándares oficiales para determinar si fue una muerte accidental o fue un feminicidio, y vemos un aumento considerable”, evidenció.

No obstante, enfatizó que el reporte del observatorio no coincide con el conteo que llevan las autoridades gubernamentales pues pretenden cuidar el prestigio de los gobernadores. Señaló directamente que así ocurrió durante la administración de Rafael Moreno Valle.

“Siempre hay una cuestión que se fue construyendo en últimos años que tiene que ver con el prestigio del gobernador en turno, su prestigio habla de muchas cosas de lo que hace por su estado, por ello si la cifra de feminicidios subía y se publicaba, su estatus y prestigio bajaba”.

Ante este escenario, Pérez Oseguera llamó a los poblanos a exigir transparencia de parte de las autoridades frente a los feminicidios. También para demandar la búsqueda inmediata de niñas y mujeres desaparecidas, puesto que su búsqueda comienza después de 72 horas.

GJ