Mediante un comunicado publicado en su sitio web, la minera indicó que solicitará una licencia ambiental para hacer las excavaciones para la búsqueda y control del líquido vital, pero que ya está haciendo algunas perforaciones con la finalidad de verificar las aguas subterráneas y superficiales.

El anuncio de la empresa se da en el marco de las denuncias presentadas por opositores a su presencia y actividades extractivas en esta demarcación de la sierra norte del estado, en  las que señalaron presuntas afectaciones a la calidad del agua tras la llegada de Almaden, mismas que fueron documentadas por el centro de análisis PODER en el estudio “Evaluación de Impacto en Derechos Humanos”.

En ese documento se afirma que debido a que las barrenaciones realizadas por la empresa canadiense en su búsqueda de metales preciosos fueron más profundas que lo autorizado, ya que llegaron hasta 800 metros bajo tierra, es evidente que hay una “potencial contaminación de los mantos superficiales y subterráneos, por drenaje ácido y metales pesados”, además de efectos negativos sobre el suelo, el paisaje, la flora y la fauna.

Ahora, según el comunicado de la minera, pretende realizar ingeniería avanzada y ambiental con la perforación de pozos de agua y el uso de equipos hidrológicos para el análisis del agua subterránea y su calidad, así como la del agua superficial.

Además realizará estudios de los materiales de las rocas y del subsuelo; y pretende instalar una estación meteorológica cerca del tajo que abrirá para la extracción de minerales.

Al mismo tiempo, Almaden Minerals anunció el hallazgo de otras áreas de extracción de oro y plata a 5 y hasta 33.7 metros de profundidad en los barrenos TU-16-463, 464 y 465; hasta 50 metros menos que los que había encontrado anteriormente a 33.5 y 89.5 metros y anunció que seguirá sus barrenaciones.

Hace una semana, el presidente municipal de Ixtacamaxtitlán, Eleazar Hernández Arroyo, rechazó que haya otorgado licencias de uso de suelo para la extracción de oro y plata de los proyectos Tuligtic e Ixtaca a la empresa canadiense o sus filiales.

Mientras que pobladores le demandaron la realización de un cabildo abierto en el que se rechacen las actividades de la minera  que tiene concesionadas 56 mil hectáreas de terreno en Ixtacamaxtitlán en los predios Caldera 3-A, Caldera 3B, ambas del 21 de noviembre de 2012 con vencimiento en el mismo día y mes, pero del año 2062 y que pretende explotar a través de un tajo a cielo abierto.