Una fuerte fuga de combustible se registró este fin de semana en la zona del Triángulo Rojo,  la cual duró más de 12 horas generando temor entre los habitantes, debido a que el olor se dispersó en los municipios de Quecholac y Acatzingo.

El derrame se presentó en las inmediaciones del kilómetro 176+400 de la autopista Puebla-Orizaba, a 400 metros fuera del derecho de vía de Pemex.

Alrededor de las 21:30 horas de ayer, los usuarios de las redes sociales comenzaron a reportar el olor a hidrocarburo en los municipios de Quecholac y Acatzingo.

Los primeros informes señalan que la fuga fue provocada por una toma clandestina en Quecholac,  cuando al parecer unos delincuentes intentaban robar el hidrocarburo y la situación se les salió de control. En ese mismo municipio, se localizó otra toma posteriormente.

Aunque las autoridades indicaron desde un principio que la situación estaba controlada y no existía riesgos para la población, los vecinos se alarmaron y algunos abandonaron sus domicilios por seguridad, según lo reportaron en redes sociales.

Personal de bomberos, Protección Civil, Pemex, Caminos y Puentes Federales y Policía Federal arribaron hasta el lugar y atendieron el auxilio.

Los cuerpos de auxilio tuvieron que esperar que la fuga disminuyera y más tarde los agentes de Pemex cerraron las válvulas de las tomas clandestinas.

La autopista fue cerrada  en ambos sentidos, en el tramo Acatzingo-Amozoc,  desde las 7:00 hasta las 9:30 horas de este domingo. 

En estos momentos la situación se encuentra controlada y también se implementó un operativo de seguridad por la autopista, en el tramo Acatzingo-Amozoc. De acuerdo con las autoridades, la circulación ya está abierta.