Cuautlancingo, Pue.- Cuando compraron sus casas, los vecinos de Paseo del Roble, en Cuautlancingo, no sabían que se encontraban en una zona de alto riesgo por el paso de ductos de Petróleos Mexicanos (Pemex) a un par de metros de su barda perimetral, hasta la madrugada de este lunes cuando el intenso olor a combustible los despertó y los obligó a salir de sus hogares, por seguridad.

Al mediodía, aún se percibía en la zona el intenso olor a petróleo crudo y sobre la superficie de las calles internas del conglomerado, el césped y la pequeña alberca del área común tenían una nata densa, aceitosa.

La administradora del conjunto semiresidencial que habitan 152 familias, María del Carmen Tapia, explicó que unos 50 vehículos sufrieron afectaciones por la caída del combustible sobre su pintura.

“Como a la una de la mañana muchos empezaron a decir que olía mucho a gasolina, diésel, se le habló a Protección Civil, llegaron, vieron que se trataba de petróleo crudo y que era una toma clandestina que estaba pasando la pista que va hacia Tlaxcala, tuvimos que desalojar a todos los vecinos y pues ahorita siguen en los trabajos de la limpieza, pero pues obvio, sí se afectaron varios autos, nuestras áreas verdes y varias viviendas”, narró.

Un trabajador de una gasolinería cercana al lugar de la fuga, dijo que cuando se presentó el incidente se escuchaba una suerte de silbido, debido a la intensidad y la fuerza con la que salía el material.

Una fotografía tomada por un vecino captó el momento de cuando una columna de más de 15 metros era lanzada a través de la perforación ilegal en el ducto de Pemex.

Hace tres meses los vecinos comenzaron a ver movimientos extraños de personas en las inmediaciones, además de que el olor a combustible se presentaba con cierta persistencia. “No sabíamos que era, pero ahora sabemos que se estaban robando el combustible”, dijo otro de los vecinos.

Buena parte de las personas que habitan este fraccionamiento proviene de otros estados de la república y no cuentan con familiares a quienes recurrir en caso de emergencias de este tipo, de modo que esta madrugada pagaron su alojamiento en hotel.

Las familias de este fraccionamiento, el más cercano a la zona del derrame, analizan la posibilidad iniciar un procedimiento contra quien resulte responsable por permitir la construcción de estas viviendas en zona de alto riesgo.

Al de por sí, escenario complicado, habrá que sumar que la recientemente abierta autopista Puebla-Tlaxcala también se ubica a menos de 20 metros, lo cual también lo convierte en un posible peligro para los condóminos.