San Pedro Cholula, Pue.- San Andrés Cholula, Calpan y Cuautlancingo ven como invasor de sus territorios al municipio de San Pedro Cholula, a pesar de que el último iniciará procesos contra ellos ante el Congreso del Estado para defender sus límites.

Funcionarios del gobierno que encabeza José Juan Espinosa Torres, revelaron que se integra un expediente para solicitar al Congreso local definir los linderos con San Andrés, debido a los constantes diferendos que se presentan por interpretaciones divergentes en materia limítrofe.

La síndico, Estela Chilaca, dijo que el trámite lo harían primeramente con San Andrés y después buscarían que ocurriera lo mismo con Calpan, Cuautlancingo y Juan C. Bonilla.

El gobierno de San Andrés Calpan inició a principios de 2015 una controversia ante el Legislativo para solicitar la revisión de la frontera con San Pedro, tras lo que consideró una violación flagrante a su soberanía municipal por la construcción de un relleno sanitario en su territorio.

El presidente calpeño, Leonardo Lázaro Jiménez, dijo recientemente que pese a que existen elementos históricos y documentales que acreditan que el predio sobre el que se asienta el tiradero es de su propiedad, los diputados no han siquiera abordado el tema.

En tanto, tras una reciente disputa por la emisión de una licencia de construcción a la escuela Montessori Tepeyac en la zona en indefinición territorial, el presidente de San Andrés Cholula, Leoncio Paisano, acusó que es San Pedro el que invade y que su gobierno utilizará todos los recursos que se encuentren a su alcance para defender su territorio.

“Sabemos desde nuestros abuelos hasta dónde llegan nuestro límites, lo único que le  pedimos también al presidente municipal de San Pedro es respeto a los límites territoriales de San Andrés porque los vamos a defender con todo”, apuntó.   

En su oportunidad, el síndico de Cuautlancingo, Víctor Xicoténcatl Romero, emitió una queja por la invasión y emisión de permisos de construcción de un fraccionamiento en una zona que le pertenece a su municipio por parte de San Pedro.

No sólo ello, sino que incluso se acusó a San Pedro de dar permiso de derribar una estructura histórica sin que le correspondiera tomar ese tipo de decisiones. Se trata de la ex fábrica textil San Diego, a la que se le tiró la barda perimetral.