Zihuateutla, Pue.- Sin heridas externas, en estado de descomposición y sin rostro fue hallado el cadáver de un hombre cerca del profundo barranco conocido como La Garganta del Diablo. Aunque tampoco portaba identificaciones entre sus ropas se halló una hoja con un nombre apuntado y dos número telefónicos que permitieron dar con su familia.

Se trata de Ismael Mares Hernández, trabajador jubilado de Petróleos Mexicanos, con domicilio en la ciudad de Poza Rica, Veracruz, quien había salido de su casa tres días atrás y fue encontrado muy cerca de la comunidad de Ocomantla.

De acuerdo con fuentes policiacas, el cuerpo no tenía rostro, pero se presume que fueron animales de rapiña los que lo habrían devorado;  también dieron a conocer que no se apreciaban en el cadáver lesiones externas, ni documentos que lo identificaran.

Sin embargo, a un costado de él, los agentes investigadores localizaron una mochila de tela, de color negro con amarillo y en el interior había algunas prendas deportivas para jugar futbol, además de una libreta que contenía un apunte en la primera hoja con el nombre de Ismael Mares Hernández y dos números telefónicos.

Los elementos policiacos marcaron a uno de ellos, contestando una mujer de nombre Marlín Mares Meza, quien después de explicarle el motivo de la llamada indicó que por las referencias descritas, especialmente por la ropa, podría tratarse de su padre Ismael Mares Hernández de 58 años quien tenía varios días desaparecido.

La mujer detalló que desde la noche del 7 de mayo, no sabían nada de su padre y abundó que tenía su domicilio en la ciudad de Poza Rica, Veracruz, era divorciado, vivía solo y era pensionado de Petróleos Mexicanos.

Agregó que por comentarios de algunos conocidos supo que el ex trabajador petrolero estuvo ingiriendo bebidas embriagantes en un bar de Poza Rica, en compañía de unos amigos, de donde salieron a las 02:00 horas del domingo y presuntamente cada uno se fue a su domicilio.

La hija expresó que después de esa reunión no supieron qué rumbo tomó su papá, pero al día siguiente lo buscaron sin tener éxito por lo que fueron a dar conocimiento a la agencia del Ministerio Público de Poza Rica, en donde les dijeron que se esperarán 72 horas para denunciar la desaparición.

Este mediodía, al asistir a Xicotepec, donde trasladaron el cadáver, los familiares lo reconocieron.