Acatlán, Pue.- En este municipio, como en muchos más de la mixteca poblana, continúan las celebraciones de temporada navideña con las “acostaditas” del niño dios, donde muchas familias se gastan hasta 15 mil pesos en los festejos a pesar de la situación económica que vive el país.

En Amatitlán de Azueta, la familia Méndez Navarro organiza cada 2 de enero un evento de este tipo.

Mauricio Méndez señaló que las posadas son fiestas tradicionales que datan de hace más de 400 años e inician 15 días antes de la Navidad, aunque en su casa organizan una el 2 de enero, misma que termina en baile.

Ellos gastan hasta 15 mil pesos en aguinaldos, piñatas, juegos pirotécnicos, villancicos y un “sonido” para el baile después de arrullar al niño dios.

Los preparativos inician desde muy temprano. En la calle se aprecia el sentimiento de felicidad ya que la familia se integra para arreglar el nacimiento, al que se le da forma durante todo el día para que en punto de las ocho de la noche comience la posada.

Es entonces que el niño es llevado al nacimiento con cantos navideños, bandas de música y la danza de los tecuanes.

Con los Méndez Navarro llegan más de 500 personas, y cada año la celebración es más popular.

Además de lo tradicional, también reparten a los asistentes tamales, café y cerveza o tequila.

Para muchos pueblos este tipo de festividades religiosas son importantes, pues representan un momento de convivencia y alegría, donde impera la fe, la devoción, el sentido de comunidad y la hermandad entre los pobladores, afirmó Mauricio, quien amenizó el baile.