• Opinión

El Gobierno de la República cumple, ¿y el del estado de Puebla?

Es su responsabilidad gestionar recursos para la infraestructura carretera de la entidad

La zona de la mixteca poblana, enclavada en la parte sur del estado, colindante con las entidades de Oaxaca y Guerrero; es la puerta principal de paso para los hermanos que en la época prehispánica conformaron la nación mixteca, hoy dividida en tres; poblana, guerrerense y oaxaqueña. Comunicada entres si por una infraestructura carretera que no han visto modernización en sus trazos.

La infraestructura carretera de esta zona, la vía Panamericana, es el principal acceso en donde a diario transitan miles de toneladas que suministran el mercado de la zona colindante de Oaxaca con nuestro estado, la zona de la montaña guerrerense, sin dejar de considerar el consumo local de los municipios poblanos sureños.

Este intercambio comercial con aquellas zonas colindantes, representan para el estado de Puebla una importante derrama económica, en especial por los comerciantes y empresarios, que realizan compras en nuestro estado, de la zona que conforman los municipios de Xochihuehuetlán, Huamuxtitlán, Alpoyeca, Tlalixtaquilla, Cualac, Olinalá, Xalpatlahuac, Tlapa de Comonfort, este último denominado “el corazón de la montaña”.

De ahí la importancia e insistencia por parte de los habitantes de esta región poblana para que se le dé continuidad a los trabajos de la obra de modernización de la carretera Puebla-Huajuapan de León, en su tramo Izúcar de Matamoros-Acatlán de Osorio.

A principios del año dos mil doce iniciaron los trabajos de una segunda etapa en el tramo Izucar- Acatlán, hicieron algunos cortes en los cerros, pero hasta ahí. En el segundo trimestre de ese mismo año, se suspenden las labores de construcción y es la fecha que no se sabe qué pasó con los 90 millones de pesos presupuestados ese año para esta etapa. Es importante que el delegado de la SCT informe sobre ese tramo carretero, ¿existe algún litigio contra la empresa por que incumplió en la ejecución de la obra? ¿Para cuándo reinician los trabajos de modernización para finiquitar el tramo de 4.2 kilómetros, al menos?

Por otro lado, es responsabilidad del gobierno estatal el gestionar recursos para la infraestructura carretera de la entidad, más allá de que si estamos hablando de un tramo carretero federal o local, en una de las zonas de más alta marginación, expulsora de migrantes, sin infraestructura industrial que permita el empleo en los lugares de origen. En el plan de desarrollo estatal estipula el crecimiento integral de las regiones; ¿En la ampliación de recursos a solicitar en el presupuesto de egresos de la federación (PEF) que planteó a los legisladores federales, está considerado el invertir en modernizar la infraestructura carretera? ¿Hasta cuándo el gobierno estatal considerará prioritario el atender las zonas de más alta marginación, con recursos que generen empleo, arraigo y desarrollo humano?

Por parte del Gobierno de la Republica, al menos ya mencionaron la estrategia a seguir en este rubro; el secretario de Comunicaciones y Transportes, Gerardo Ruiz Esparza, mencionó el 17 de septiembre del año en curso, una obra que beneficia a esta zona en particular: “En carreteras, la Puebla-Tlapa-Marquelia, ya se amplió el tramo Puebla-Izúcar de Matamoros, mientras el de Izúcar de Matamoros-Tlapa el proyecto ejecutivo se termina en diciembre para iniciar la obra en 2015; la reconstrucción de 162.7 kilómetros del tramo Tlapa-Marquelia se termina en diciembre de este año”.

En este tema sumamos todos, queda pues por parte del diputado federal de este distrito, Filiberto Guevara González, el insistir, presentando propuestas para alcanzar un pedazo del Presupuesto de Egresos de la Federación, para que en el próximo año se continúe con este proyecto que inició en la administración del sexenio local anterior y en éste, sigue parada la obra que beneficiará a miles de ciudadanos poblanos.

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