San Andrés Cholula, Pue.- El presidente municipal de San Andrés Cholula, Andrés Coyotl Coyotl, arrastra una deuda con proveedores y acreedores por 8.7 millones de pesos, situación que se suma al malestar en su contra por parte de los regidores, quienes votaron en Cabildo su destitución y presentaron la solicitud al Congreso de Puebla.

De acuerdo con el estado de Ingresos y Egresos de ese municipio, con corte al mes de agosto, que fue cuando llegó al cargo como suplente de Miguel Ángel Huepa, Cóyotl inició una administración que gastó mayores recursos que los obtenidos por el ayuntamiento.

De acuerdo con el documento que contempla el balance financiero del 8 al 31 de agosto de 2013, el edil autorizó un gasto total de 25 millones 99 mil 293 pesos, cuando los recursos que ingresaron a la Tesorería Municipal fueron de 16 millones 412 mil 649 pesos.

Los principales gastos se dividieron en 12 millones 323 mil pesos en inversión pública, 6 millones 72 mil 686 pesos en servicios personales y 4 millones 785 mil pesos en servicios generales.

Para completar los gastos se reportaron 994 mil 703 pesos de materiales y suministros, y otros 923 mil 547 pesos de subsidios, transferencias y ayudas.

Asimismo el documento detalla que la deuda a proveedores, hasta ese corte, ascendía a 1 millón 312 mil 934 pesos, mientras que los compromisos con acreedores diversos eran de 6 millones 658 mil 747 pesos y 817 mil 710 pesos en impuestos por pagar.

Acusan a Jesús Romero Toxqui

Tras la destitución del edil junto con el tesorero Francisco Mendoza Alvear y el secretario de seguridad, Sergio Iván Torres Bravo, el segundo acusó al regidor Jesús Romero Toxqui –quien también fue suplente de Miguel Ángel Huepa- de dejar gastos por comprobar de hasta 11 millones de pesos, deuda a proveedores por 8 millones de pesos y de omitir la entrega de llantas a la Secretaría de Seguridad Pública con valor de 700 mil pesos, entre otros rubros.

Al respecto, el regidor de gobernación minimizó los argumentos en su contra asegurando que estos corresponden a “un acto infantil” que carece de evidencias y fundamentos, por lo que no son motivo de preocupación o temor.

“Es un asunto que a mí me da risa, porque son acusaciones infundadas, son acusaciones meramente desesperadas, pero bueno, tampoco me extraña, siendo que el proceder del señor presidente y de Mendoza Alvear ha sido de manera muy infantil”, indicó.

Ante esta situación, Romero Toxqui pidió al encargado de despacho de la tesorería del ayuntamiento de San Andrés que si tiene pruebas o argumentos sólidos los presente de manera formal, para que de esa forma pueda realizarse una investigación en la cual se revele la verdadera situación de las finanzas que dejó tras desprenderse del cargo de edil interino.

En ese sentido, le recordó a Mendoza Alvear que no es autoridad fiscalizadora, y que la única institución que tiene la facultad para realizar una auditoría de sus cuentas públicas es la Auditoría Superior del Estado de Puebla.

Consideró que estas acusaciones son dolosas, pues se realizan para perjudicar su imagen, pero sobre todo para distraer la atención de las irregularidades que se le han demostrado a Francisco Mendoza Alvear, como su denuncia por peculado en el gobierno de Izúcar de Matamoros y el desvío de un millón 800 mil pesos en San Andrés, lo que no se ha atrevido a aclarar.

“Ni me preocupa ni me ocupa… no me quita el sueño”, concluyó el regidor, para negar que procederá legalmente en contra de quienes realizaron estas acusaciones.