Municipios Puebla

Hace unos días arribó a una comunidad del municipio de Tzicatlacoyan, al sur del estado de Puebla, una madre poblana con dos menores hijos recién aterrizados desde el aeropuerto JFK de Nueva York luego de cerca de 15 años de radicar en ese estado de la Unión Americana.

Sus pequeños hijos son nacidos en la ya conocida como Puebla York luego del crecimiento importante que ha tenido en las últimas décadas el número de poblanos radicando en ese gran estado y donde han encontrado el cobijo laboral y a su vez una buena calidad de vida.

Sin embargo, la decisión del padre de los niños de regresar a su comunidad de origen para retomar su vida en México mientras él permanece un par de años más en la Unión Americana para ahorrar otros cuantos dólares al tiempo en que espera la decisión de la Cámara estadunidense de apoyar o no la Propuesta de Alivio Migratorio del Presidente Barack Obama.

Mientras eso sucede los menores, un niño de 10 años y la niña de 12 se adaptan a la cultura mexicana, totalmente nueva para ellos, sobre todo después de haber estudiado sus primeros años de escuela entre compañeros de diferentes nacionalidades pero todos con el idioma inglés.

El trámite de documentos, un gran problema

Mientras los pequeños se adaptan a su nueva vida en idioma español, su madre enfrenta constantes viajes a la Embajada de Estados Unidos en la ciudad de México para los diversos trámites de sus hijos como ciudadanos americanos.

Porque más allá de la actual polémica impuesta por los aspirantes Republicanos a la Presidencia de los Estados Unidos sobre la necesidad de cancelar el derecho de ser reconocidos como norteamericanos de los hijos nacidos en Estados Unidos pero de padres indocumentados, lo cierto es que actualmente todavía prevalece ese estatus para los nacidos en la Unión Americana, sin importar que al ingresar a territorio mexicano sean registrados con la doble ciudadanía.

Es muy probable que para quienes vivimos en la capital poblana sea relativamente sencillo viajar constantemente a la ciudad de México, cuando así lo requerimos contemplando solo dos o tres horas para llegar a nuestro lugar objetivo. Sin embargo para quienes viven en otras regiones del estado como la mixteca o la sierra negra o norte, es diferente pues deben sumar otras dos horas, por lo menos, a su recorrido.

Cuando se trata de padres mexicanos con hijos nacidos en Estados Unidos la situación se complica, pues los constantes trámites de actas de nacimiento, de renovación de pasaporte azul, cartas de aprobatoria de la estancia de los menores fuera de territorio norteamericano, entre otros, dificulta la visita a esas oficinas, sobre todo cuando se le añade el costo por cada viaje.

Casos como estos son ya muy comunes en todo el estado de Puebla, sobre todo luego del ríspido ambiente que se está creando en ese país en contra de los indocumentados, sobre todo los mexicanos. Independientemente de la cantidad de deportaciones diarias que están separando a las familias que, algunas, por décadas radicaron en territorio norteamericano.

En la década de los setentas u ochentas según recuerdo, había unas oficinas en la ex Cancha de San Pedro, hoy San Pedro Museo de Arte, que facilitaban en mucho los trámites a las familias migrantes. 

Hoy la cantidad de poblanos con algún vínculo migrante ha crecido exponencialmente, de ahí que quizá sería muy favorable que esas oficinas se retomaran.

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